más de un kilómetro de profundidad, el hielo de Groenlandia protege un antiguo lago. Capturados por el hielo y sus patrones, los expertos lograron encontrar un lecho que podría desatar los secretos climáticos de la maravillosa zona del círculo polar ártico.
Los científicos del Observatorio Terrestre Lamont-Doherty fueron los afortunados en descubrir una cuenca que alguna vez albergó un lago. A través del análisis geomorfológico y un modelado hidrológico, la superficie de unos 7,100 km2 resultó contener rastros fósiles químicos de climas pasados.
¿Por qué es importante el lago antiguo de Groenlandia?
Parecería obvio encontrar la marca de un lago en un territorio rodeada de agua congelada. Sin embargo, los expertos apuntan a que las pistas de este clima arcaico pueden indicar el futuro de la Groenlandia actual.
A medida que se reducen los casquetes polares del Ártico, el lago antiguo podría convertirse en un depósito de conocimiento majestuoso. Por ahora la cueva es inaccesible, pero se espera que la ciencia permita revelar cómo es que se comportó el hielo durante estos miles de años.
La piel helada que ahora cubre Groenlandia es colosal, pero muy posiblemente debajo de ella se encuentren señales de la vida y el clima prehistórico. Mientras tanto, los instrumentos geofísicos en el aire han logrado captar señales de las estructuras geológicas escondidas por debajo de la gruesa capa de hielo.
El legado de una historia climática glacial
Este descubrimiento apuntaría a que el nivel del amor, el cual ahora está cambiando por el deshielo, estuvo alguna vez unos 250 metros más bajo de lo que lo conocemos. Incluso, algunas teorías sobre el origen del lago antiguo de Groenlandia se han desprendido de estos datos.
Expertos señalan que se pudo formar durante una antigua falla que separó la Tierra, y seguramente todos están pensando en el comienzo de la era del hielo. Pero, la realidad es que aún no se puede concluir nada.
No obstante, las hipótesis sobre la existencia de una Groenlandia sin hielo se vuelven cada día más fuertes. Sin embargo, habrá que esperar a que se tenga acceso al sedimento para analizar el patrón de derretimiento del hielo y la variedad de materiales que pudieran estar contenidos en la zona.
Ahora sólo sabemos que esta cuenca es como un tesoro escondido que espera a ser revelado. Será entonces a través de su exploración que podremos saber mucho más de la historia glacial, climatología y ambiental de Groenlandia.
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