LOS ÁNGELES — Los Dodgers de Los Ángeles aguardaron 32 años para volver a salir campeones de la Serie Mundial. Revalidar el título nunca ha sido fácil, y afrontan la segunda mitad de la temporada, persignándose a que las peores turbulencias quedaron atrás.
Un pitcher abridor suspendido, lesiones y una producción ofensiva deficiente ha conspirado en su contra. Es la primera vez desde 2016 que los Dodgers no se encuentran en la cima tras el Juego de Estrellas.
Pero están cerca.
Con marca de 56-35, tienen la segunda mayor cantidad de victorias en las Grandes Ligas, por detrás de sus rivales Gigantes de San Francisco (57-32). LA se encuentra dos juegos atrás de los líder Gigantes en el Oeste de la Liga Nacional, división que los Dodgers han ganado ocho años seguidos.
“Considerando todo con lo que hemos tenido que lidiar, diría que es bastante bueno», comentó el primera base Max Muncy. “No hemos jugado ni siquiera cerca del calibre que podemos tener”.
Durante un tramo, los Dodgers tuvieron foja de 5-15. Una serie de lesiones malograron a los pitchers Clayton Kershaw y Dustin May y al torpedero Corey Seager, entre otros.
La rotación quedó más mermada cuando el abridor Trevor Bauer fue puesto en licencia administrativa el 2 de julio a raíz de acusaciones de delitos sexuales y violencia doméstica.
“Ha sido complicado”, reconoció el estelar jardinero Mookie Betts. “Ha pasado de todo”.
Muncy ha sido la excepción, bateando para .270, con 19 jonrones y 52 carreras impulsadas en la primera mitad.
Los Dodgers podrían buscar un abridor antes de la fecha límite de canjes porque el uso de los brazos del bullpen para cubrir ausencias no es algo sostenible. May se sometió a una cirugía Tommy John en mayo, uno de los tres lanzadores del equipo en hacerlo esta temporada.
Kershaw se recupera de una inflamación en el antebrazo izquierdo, y el retorno del tres veces ganador del Cy Young es incierto. El equipo espera contar pronto con el lesionado relevista Jimmy Nelson.
David Price se sumará a la rotación en algún momento tras desempeñarse como relevista en la primera mitad.
“Tengo la disposición para todo lo que me pidan”, dijo el zurdo.
Seager podría volver pronto tras fracturarse la mano derecho, probablemente para una tanda de siete juegos en casa a inicios de la próxima semana.
“Este el momento en que los buenos equipos empiezan a despegar», señaló el manager Dave Roberts. “Anticipo que vamos estar en lo alto cuando acabe el año”.
Los Dodgers visitarán Colorado para una serie de tres juegos desde el viernes. Los Gigantes viajarán a Los Ángeles la semana próxima por última vez durante la temporada regular.
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