Bosque en la Garrotxa (Gerona). EFE/J. J. GuillénPublicado por: Pablo Rojo 29 julio, 2021 

La nueva Estrategia Forestal de la UE incluirá la plantación de 3.000 millones de árboles hasta 2030 para emplear “bosques y otras infraestructuras verdes como soluciones naturales al cambio climático”, ha explicado el portavoz belga de la CE para acción climática y energía, Tim McPhie.

Durante una entrevista con Efe, McPhie ha señalado además que estas plantaciones permitirán afrontar también otro tipo de “acontecimientos extremos” como las recientes inundaciones en Centroeuropa, que dejaron cerca de dos centenares de fallecidos y un número indeterminado de desaparecidos, además de importantes destrozos materiales.

Enmarcada en el Pacto Verde Europeo y basada en la Estrategia de la UE sobre Biodiversidad, la iniciativa ha sido oficialmente adoptada esta semana, con la idea de incrementar el número y la calidad de los bosques europeos y llevar a cabo “un efectivo seguimiento de los mismos” y una correcta gestión de sus materias primas.De esta manera se pretende “contribuir a una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero de al menos un 55 % de aquí a 2030 y lograr la neutralidad climática en 2050 en la UE”, según la propia Comisión Europea. 

McPhie considera que la gestión de los bosques “continúa siendo un desafío importante” para las autoridades de Bruselas y confía en que la nueva Estrategia se pueda aplicar con éxito pues, aunque la que estaba vigente hasta ahora “iba por el buen camino” a la hora de incrementar las poblaciones forestales, cree que “no fue muy ambiciosa en sus acciones”.

Especies nativas o que “contribuyan de mejor manera a los objetivos”

Los 3.000 millones de árboles que aspira a plantar ahora la CE reunirán una serie de requisitos para garantizar su arraigo, entre los cuales figura que los bosques estén compuestos principalmente por especies nativas, combinadas con aquéllas que “contribuyan de mejor manera a los objetivos estratégicos”, como la absorción de carbono o la bajada de temperaturas en zonas urbanas.

Se trata de “fomentar la plantación del árbol correcto en el lugar correcto”, tal y como lo ha definido a Efe el portavoz comunitario, ya que se ha practicado una serie de estudios sobre “los árboles específicos que son más útiles para limpiar el aire en comparación con otros árboles ” y otros aspectos como, por ejemplo, la importancia de la copa del árbol en el proceso de regulación de la temperatura ambiente.

Tierras privadas, áreas urbanas y periurbanas

Uno de los elementos clave para lograr el incremento previsto en superficie forestal en Europa será la colaboración de “los propietarios de tierras que no necesariamente son forestales”, según indican tanto McPhie como el borrador del documento europeo.

Para conseguir una mayor cooperación y adopción de prácticas forestales por parte de estos propietarios, el portavoz de la CE apuesta por apoyar la “combinación de líneas de árboles en tierras de cultivo o a lo largo de grandes canales de infraestructura”.

También será “muy importante” el aumento de poblaciones forestales en “áreas urbanas y periurbanas”, así como el seguimiento del desarrollo tanto de los bosques primarios como de los maduros y el impulso al empleo de biomasa leñosa “dentro de los límites de la sostenibilidad” y de “utilización eficaz de la madera”.

Para el éxito de este programa, las autoridades europeas “debemos emprender un buen mapeo y desarrollar planes de manejo de conservación, aplicarlos y monitorearlos para ver y aprender realmente sobre lo que está sucediendo”, ha reconocido McPhie.

Si el plan tiene éxito, en 2030 la Unión Europea contará un 10 % de su superficie de Naturaleza estrictamente protegida: en la actualidad, este porcentaje es del 3 % según datos comunitarios. EFEverde