Los líderes del Campeonato tomaron una ventaja temprana a través de Fabio Carvalho antes de que Ilkay Gundogan y John Stones respondieran con dos goles rápidos.
Un doblete de Riyad Mahrez después del descanso terminó con las esperanzas de Fulham de dar la sorpresa en lo que fue un encuentro abierto y entretenido jugado frente a una casa llena en el Etihad.
Posiblemente dos de los equipos más ofensivos del país, ambos en la cima de sus respectivas divisiones, parecía que los goles estaban garantizados.
Lo que no se esperaba era que hubiera tres goles en los primeros 13 minutos, y podría haber habido dos o tres más en esa apertura frenética.
Jack Grealish podría haber anotado en el primer minuto, pero fue el Fulham quien anotó con su primer ataque cuando un pase inteligente a Harry Wilson vio su centro raso desde la derecha convertido por Fabio Carvalho desde cerca.
Al City le tomó solo 90 segundos empatar, con Ilkay Gundogan rodando un centro de Riyad Mahrez desde seis yardas.
Fulham continuó atacando con determinación, pero los Blues volvieron a golpear siete minutos después con un raro gol de esquina.
El lanzamiento de bandera de Kevin De Bruyne fue atacado en el poste cercano por Nathan Ake y John Stones, y Stones recibió el movimiento que llevó el balón más allá de Paulo Gazzaniga y hacia la esquina superior derecha.
El juego se estabilizó a partir de entonces, con menos aperturas en un duelo bastante parejo que vio a los Blues entrar al descanso con una ventaja de 2-1.
Independientemente de los ajustes tácticos que hizo Pep Guardiola en el descanso, el juego estaba prácticamente terminado a los 12 minutos del reinicio.
El tercero del City llegó cuando la carrera laberíntica de Grealish hacia el área terminó con un rudo desafío de Joe Bryan y Mahrez convirtió el penal resultante.
Luego, cuatro minutos más tarde, el extremo argelino fue intervenido por De Bruyne y su disparo golpeó a Harrison Reed en su camino hacia la esquina inferior izquierda.
Es posible que tengamos que esperar a que el panel de objetivos dudosos decida a quién se le atribuye ese.
Con menos de una hora de juego y una ventaja de 4-1, Guardiola pudo recuperar las piernas pensando en el partido del miércoles contra Brentford.
Hubo varias medias oportunidades en la última media hora y Liam Delap, de vuelta después de varios meses de baja, no recibió un buen gol de cabeza del árbitro asistente.
Pero en última instancia, fue una cómoda victoria para el City, que se acerca cada vez más a otra fecha de Wembley.
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