La cabeza de serie No. 21 Petra Kvitova regresó a la cuarta ronda del US Open por séptima vez después de salvar dos puntos de partido para vencer a la cabeza de serie No. 21 Garbiñe Muguruza 5-7, 6-3, 7-6[10] en 2 horas y 38 minutos
El choque de dos veces campeones de Grand Slam, la séptima edición de una rivalidad que se remonta a 2015, fue un estallido hasta el final. Muguruza sacó para el partido con 5-3 en el tercer set y tuvo dos pelotas de partido con el servicio de Kvitova con 6-5, pero la checa escapó de ambas situaciones para finalmente convertir su cuarta pelota de partido en el súper desempate.
Las mejores actuaciones de Kvitova en el US Open hasta la fecha son un par de cuartos de final en 2015 y 2017, y tendrá la oportunidad de un tercero contra la cabeza de serie número 8, Jessica Pegula. La estadounidense se recuperó de perder un punto de partido en el desempate del segundo set para derrotar a la jugadora de la previa Yuan Yue por 6-2, 6-7(6), 6-0 en 2 horas y 3 minutos.
Estos son los puntos clave de las victorias de Kvitova y Pegula:
La forma y la historia ganaron: a la mitad de la gira sobre césped, el récord de 2022 de Kvitova estaba en números rojos con 10-13. Pero un título en Eastbourne le dio la vuelta a su temporada: desde entonces, la jugadora de 32 años ha tenido marca de 15-3, incluida también una segunda posición en Cincinnati hace dos semanas.
Por el contrario, Muguruza llegó a Nueva York en forma algo catastrófica, habiendo compilado un récord de temporada de 9-14. Desde que ganó las Finales de la WTA Guadalajara 2021, la española no había derrotado a una oponente del Top 30 ni había logrado tres victorias consecutivas, las cuales estaban en juego para ella aquí.
Un par de victorias sobre dos adolescentes muy publicitadas, Clara Tauson y Linda Fruhvirtova, detuvieron la caída de Muguruza esta semana, hasta cierto punto. Pero aunque luchó hasta el final, finalmente el desenlace hizo que Muguruza flaqueara ligeramente mientras que Kvitova hizo los tiros más grandes.
La explosividad venció a la firmeza: los máximos de Kvitova fueron impresionantes, pero las oscilaciones en su nivel también fueron mucho mayores que las de sus oponentes. La dos veces campeona de Wimbledon anotó 43 tiros ganadores frente a los 21 de Muguruza, y por momentos pareció injugable, como los tres golpes de derecha consecutivos con los que selló el primer quiebre de servicio del partido por 4-2 en el primer set.
Pero en un abrir y cerrar de ojos, Kvitova también parecía capaz de tirar el partido por la borda. Dos dobles faltas y dos errores de derecha le dieron ese quiebre de inmediato, y otro desastroso trío de dobles faltas en el 5-5 le dio a Muguruza otro quiebre. Kvitova finalmente anotaría 12 dobles faltas.
En medio de los cambios salvajes de forma de Kvitova, Muguruza se mantuvo constante. La ex No. 1 del mundo marcó la mayoría de sus juegos de servicio con poco alboroto, consiguiendo el 67% de sus primeros servicios y ganando el 65% de esos puntos. Ella respaldó esto con incursiones juiciosas a la red, con la llave de volea de revés para cerrar el primer set.
Un solo quiebre de servicio decidió el segundo set, con Kvitova clavando una bala de derecha ganadora para subir 4-2. Pero en el mismo tramo del tercero, ese golpe la volvió a defraudar para poner arriba 4-2 a Muguruza.
Muguruza parpadeó en el servicio solo una vez, cuando dio un paso adelante para cerrar el partido en 5-3. Comenzó con una doble falta propia, fue atraída por el error por el repentino uso estratégico de Kvitova de la rebanada, y se rompió con un golpe de derecha.
El clímax del partido vio a Kvitova caminar con éxito por la cuerda floja de su juego. Sobrevivió a un juego de 10 minutos para forzar el súper desempate, salvando un punto de partido con un ace y el segundo cuando un golpe de derecha de Muguruza encontró la red. No pudo llevarse sus primeros tres puntos de partido, pero un espectacular golpe ganador de derecha en carrera trajo un cuarto, convertido cuando Muguruza anotó otro golpe de derecha.
Pegula vuelve a demostrar ser confiable, pero Yuan es alguien a tener en cuenta: la clasificada más baja del récord de cuatro mujeres chinas en la tercera ronda del US Open, la clasificatoria de 23 años, Yuan, se enfrentó a un desajuste en el papel. La número 142 del mundo nunca antes se había enfrentado a una oponente Top 20, y mucho menos a una jugadora con la consistencia probada de Pegula en los torneos más importantes: dos cuartos de final de Grand Slam, una final WTA 1000 y dos semifinales WTA 1000 solo este año.
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