Actualmente las abejas están enfrentando al Loque America (AFB), una enfermedad contagiosa causada por una bacteria que produce esporas, conocida como Paenibacillus larvae. Esta bacteria mata las larvas en las celdillas de cría de obreras, por lo que en las colmenas infectadas la colonia presenta un aspecto irregular o salteado.
Afortunadamente una empresa biotecnológica americana ha diseñado un medicamento para prevenir la loque americana, así que los apicultores de Estados Unidos pronto podrán tener acceso a esta vacuna que podría ayudar a salvar sus colmenas de la enfermedad que tiene amenazadas a las abejas, que están consideradas como los seres más importantes del planeta.
Por qué las abejas son tan importantes para el planeta
Las abejas forman parte de la biodiversidad de la que dependemos todos para sobrevivir, esto se debe a que las abejas son las responsables de mantener los campos y los paisajes vegetales tal y como los conocemos hoy en día. Al ser un polinizador, las abejas contribuyen directamente a la reproducción de muchas de las especies de flores que luego se transforman en los frutos que comemos. El 90% de los alimentos que consumimos se dan gracias a la polinización de las abejas. Esto es gracias a que cuando los animales e insectos polinizadores recogen el polen de las flores, lo esparcen y permiten que las plantas y muchos cultivos alimentarios se reproduzcan.
Lamentablemente las poblaciones de abejas han disminuido en todo el mundo en las ultimas décadas, esto se debe a muchas razones entre las cuales entra la pérdida de su hábitat, las practicas agrícolas intensivas, los cambios en los patrones climáticos y el uso excesivo de agroquímicos como los pesticidas.
De acuerdo con un estudio de la Universidad de Harvard, la polinización inadecuada está reduciendo el rendimiento mundial de frutas, verduras y frutos secos entre un 3% y 5% Como consecuencia de esto, muchas personas tendrían dificultades para acceder a opciones alimentarias saludables, provocado un exceso de muertes por enfermedad.
En los modelos usados por los investigadores de Harvard, las naciones de renta baja perderían ingresos significativos al disminuir el rendimiento de los cultivos, pero fueron los habitantes e países de ingresos medios y altos quienes mostraron mayores efectos sobre la salud, demostrando que hacer demasiado poco para ayudar a los polinizadores no sólo perjudica a la naturaleza sino también a la salud del ser humano.
Por eso, además de haber encontrado una vacuna para preservarlas luego de la laque americana, aún hay algunas cosas que podemos hacer por ellas nosotros como individuos:
- Plantar flores portadoras de néctar en nuestros jardines, terrazas o balcones.
- Comprar miel o productos de colmena con apicultores orgánicos.
- Limitar lo más posible el uso de pesticidas y en caso de utilizarlos, que sean naturales para que no dañen a las abejas, y rociarlos cuando no hay viento por la noche, cuando las abejas ya se hayan retirado de las plantas.
La primera vacuna para abejas
El declive global de las poblaciones de abejas es un grave problema en nuestro mundo moderno, pues esta pérdida no sólo pone a los ecosistemas naturales en una posición vulnerable, sino que también pone en peligro un tercio del suministro mundial de alimentos y la nutrición básica del ser humano.
En 2022, la empresa biotecnológica Dalan Animal Health patrocinó un ensayo controlado con placebo sobre la seguridad y eficacia de esta primera vacuna para abejas, el cual arrojó excelentes resultados. Pues el medicamento no sólo protegió de la muerte por AFB a las abejas obreras y a la reina, sino que también le dio inmunidad a la siguiente generación al actuar en los ovarios de la realeza.
Gracias a estos resultados, el Departamento de Agricultura de EE.UU concederá una licencia condicional de dos años para la vacuna contra la loque americana que está acabando con las abejas melíferas. Durante este periodo de tiempo, la empresa distribuirá una cantidad limitada de vacunas a los apicultores estadounidenses, y si todo va como lo planeado, existe la posibilidad de que los apicultores tengan acceso directo a la vacuna.
Referencias: Smith, M., Mueller, N., Springman, M., Sulser, T., Garibaldi, L., Gerber, K., Myers, S. Pollinator Deficits, Food Consumption, and Consequences for Human Health: A Modeling Study. Environmental Health Perspectives (2022). DOI
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