- Just Fontaine falleció el 1 de marzo a los 89 años
- El exdelantero de Francia ostenta el récord de goles marcados en una sola edición de la Copa Mundial de la FIFA
- Sus logros en el fútbol mundial serán por siempre recordados
A menudo se dice que los récords están para batirse. Sin embargo, el de Just Fontaine, de goles marcados en una sola edición de la Copa Mundial de la FIFA, sigue ahí después de 65 años. Y no parece que corra peligro. Desafortunadamente, su autor no es eterno. La leyenda del fútbol francés falleció el 1 de marzo de 2023 a la edad de 89 años.
«Mi récord sigue ahí. Creo que me lo llevaré a la tumba», declaró el que fuera delantero de los Bleus en 2002. No se equivocó. Nacido en Marrakech (Marruecos) en 1933, de padre francés y madre española, llegó a Francia a los 20 años para defender los colores del Niza, donde marcó 53 goles en 82 partidos. Eso suscitó el interés del Reims, por entonces un coloso del fútbol galo, y de la selección nacional. De 1953 a 1960 lució la camiseta azul en 21 ocasiones, con un excepcional total de 31 dianas. Un promedio fantástico conseguido en gran medida gracias a sus actuaciones en la escena mundial.
«Caminaba sobre el agua«
En la Copa Mundial de la FIFA Suecia 1958 vio puerta 13 veces, más que ningún otro, anterior o posterior a él, en una sola edición del certamen. El delantero centro del Reims sumó cuatro contra la República Federal de Alemania, tres contra Paraguay, dos contra Yugoslavia e Irlanda del Norte, y uno contra Brasil y Escocia.
«En 1958, me habían operado del menisco el 7 de diciembre, y el 15 de febrero volví a jugar. Hice todo lo necesario para recuperarme, y de repente, en junio, caminaba sobre el agua. Igual que Jesús», contó sonriente en 2014. Curiosidades de la historia, Justo conquistó el hito con calzado prestado.
Rendimiento colectivo más que individual
Durante el último entrenamiento de Francia, una de sus botas de tacos reventó sin remedio. «En aquel entonces sólo teníamos dos pares de botas, y no había patrocinadores. Yo me quedé sin nada». En ayuda del ariete acudió un compañero suyo, el suplente Stéphane Bruey, que calzaba su mismo número. «Algunos de mis goles surgieron de la suma de dos espíritus dentro del mismo zapato», le gustaba recordar.
Derrotados en semifinales por Brasil, los Bleus tuvieron que conformarse con la medalla de bronce. «Mi actuación personal la olvidé pronto. Me quedo más bien con nuestro tercer puesto que con mi primero», aseguró. «El título de máximo goleador, en aquella época, a nadie le importaba un rábano». Y sin embargo hoy todo el mundo lo recuerda aún…».
Una huella eterna
Nada más conocer la noticia de su fallecimiento, el presidente de la FIFA le rindió un sentido homenaje: «Nos hemos enterado con gran pesar del fallecimiento de Just Fontaine. Just fue un futbolista emblemático y su extraordinaria actuación en 1958 cimentó su legado como uno de los más grandes de la Copa Mundial de todos los tiempos. Marcar la cifra récord de 13 goles en una sola edición de la Copa Mundial de la FIFA es algo que a día de hoy nadie ha igualado. La huella que dejó en el mundo del fútbol será por siempre recordada y el récord es muy probable que nunca se supere. Mis más sinceras condolencias a los seres queridos de Just en estos momentos tan difíciles. Descanse en paz».
Los récords están para batirse. Quizá algún día ocurra con el de Just Fontaine. Pero la huella que dejó en los libros de historia y en los corazones de todos los aficionados al fútbol es eterna.
fifa.com