Erling Haaland, con un doblete y un tanto para el recuerdo, lidera a un City que rindió a un gran nivel en la segunda parte. Kevin De Bruyne se convirtió en el jugador más rápido en llegar a las 100 asistencias en la Premier League. El Arsenal queda a cinco puntos.
A falta de dos meses para que termine la temporada es el momento de dar el todo por el todo. Con la Champions League y la FA Cup a la vuelta de la esquina, tocaba centrarse de lleno en una Premier League en la que está prohibidísimo fallar.
Pep Guardiola avisaba en la previa:
«El Bayern es en lo último que pensamos. Nuestros pensamientos están puestos en el Southampton, en la Premier League, que es nuestro día a día, cada semana».
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Con el Arsenal jugando mañana domingo en Anfield, el de hoy contra el Southampton era un día señaladísimo en el calendario para meter presión.
El técnico catalán decidió no tocar prácticamente nada del once de la semana pasada que firmó uno de los mejores partidos de la temporada contra el Liverpool. Un solo cambio: el recuperado Erling Haaland por Julián Álvarez.
En la memoria a corto plazo cityzen, permanecía grabado que los dos últimos desplazamientos se habían saldado con empate y derrota, así que tocaba ahuyentar fantasmas desde buen inicio.
HAALAND ROMPE EL PARTIDO CUANDO MÁS SE LE NECESITABA
Con paciencia, el City masticaba los ataques desde los primeros compases. Posesiones muy largas de mucha calma.
En una de las primeras, en el minuto 5, una gran salida de balón de los de Guardiola bajo presión casi termina en el primero. Grealish se topó con Bazunu y Kevin de Bruyne casi se encuentra con el rechace.
No obstante, fue una de las pocas acciones aisladas claras ante un Southampton que salió al St Mary’s Stadium con ganas de poner el cerrojo en su portería.
Los Saints aguantaban y salían al contraataque para intentar intimidar a los Skyblues en las pocas opciones que tenían.
En el 15, Sulemana tuvo una oportunidad a campo abierto muy clara, pero entre Nathan Aké y Ederson estuvieron muy finos para cortar cualquier posibilidad de peligro claro.
El encuentro entró en una fase algo más oscura. Muchas interrupciones en el juego. Circulación algo lenta del City en fase ofensiva. Colocación defensiva impecable del Southampton.
La primera parte languidecía a ritmo bajo hasta que llegó el de siempre: Erling Braut Haaland.
En el 40, ya rozó el tanto en una jugada en la que cazó un remate de cabeza cuando nadie daba un duro para que llegara a un centro complicado.
Cinco minutos después, en la víspera del entretiempo, cuando más daño hace, el noruego se encargó de encarrilar la victoria con un gol marca de la casa.
Haaland se conjuró con su mejor socio, Kevin De Bruyne, para anotar el primero. Centro del belga con rosquita desde la izquierda y el delantero perforó la red de cabeza. Lo de siempre con los de siempre.
EL CITY Y HAALAND VUELAN EN LA SEGUNDA PARTE
El golpe aturdió (y mucho) al Southampton, que bajó la guardia después del descanso.
El City no quería sufrir y saltó en el segundo tiempo con ganas de sentenciar el trabajo para ahorrarse sustos. Los de Pep Guardiola fueron un vendaval.
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En el 51, Gündogan por poco encuentra la escuadra después de una gran transición skyblue en la que Grealish buscó las cosquillas a la defensa de los Saints.
El propio Jack, que se marcó una gran segunda parte, encontró portería en el minuto 58. Clínic de cómo bajar un balón de espaldas a la portería de Haaland, masterclass de Kevin de Bruyne de dar un pase en el momento justo y recompensa merecida para Grealish.
Su primer disparo lo taponó Bazunu, pero él mismo cazó el rechace para anotar un segundo gol que daba mucha tranquilidad al City.
Los Skyblues gustaban y se gustaban. Los goles por fin abrieron espacios en la defensa del Southampton, algo que tanto había costado en la primera mitad.
En pleno huracán cityzen, emergió una jugada para la posteridad. En el 68, Jack Grealish, desde banda izquierda, atisbó con el rabillo del ojo a Erling Braut Haaland desmarcado solo en el segundo palo.
Su centro fue tenso y llevaba buena trayectoria, pero Haaland es tan veloz que ya sólo podía rematar ese balón de espaldas a la portería. Entonces, se hizo la luz. El noruego se elevó, levitó prácticamente, y enganchó un remate acrobático espectacular.
A caballo entre la tijera y la chilena, la plasticidad de su impacto con el balón fue una delicia, como deliciosos son los 30 tantos que lleva en 27 partidos en la Premier League. Es un extraterrestre del gol. Somos inmensamente afortunados de tener alguien tan diferencial en Manchester.
Con el 0-3, llegó el único tanto del Southampton. En una de las pocas jugadas que pudo trenzar el equipo local, Sékou Mara batió a Ederson. Dos goles lleva el francés esta temporada y, curiosamente, los dos al City.
Sin tiempo para la reacción, los Skyblues rápidamente forzaron un penalti claro. El contacto de Walker-Peters sobre De Bruyne fue meridiano. Julián Álvarez, que había sustituido a Haaland hacía cinco minutos, no erró desde los once metros. Fuerte y al centro. El Araña siempre, siempre cumple.
En los últimos diez minutos de encuentro, el City amagó con el quinto. Bednarek rechazó sobre la línea de gol un remate de Bernardo Silva que hubiera sido el 1-5.
Sin más sobresaltos, el conjunto de Pep Guardiola se llevó unos preciosos y preciados tres puntos de Southampton, algo que se había resistido en las últimas dos ocasiones. Tras el asalto a St Mary’s Stadium, la lucha por la Premier continúa. Ahora el balón está en el tejado Gunner.
EQUIPOS
SOUTHAMPTON XI: Bazunu, Walker-Peters, Bednarek, Bella-Kotchap, Maitland-Niles, Alcaraz (Djenepo, 69), Ward-Prowse, Lavia (Diallo, 80), Elyounoussi (Armstrong, 61), Walcott (Perraud, 80), Sulemana (Mara, 69).
Banquillo: McCarthy, Caleta-Car, Onuachu, Edozie.
CITY XI: Ederson, Stones (Walker, 56), Akanji, Dias, Aké (Gómez, 81), Rodrigo (Phillips, 81), De Bruyne, Gündogan (c), Mahrez (Bernardo, 56), Grealish, Haaland (Álvarez, 69).
Banquillo: Ortega Moreno, Laporte, Palmer, Lewis.
mancity.com