Tras dos contundentes éxitos ante equipos punteros, el Paris Saint-Germain tenía toda la intención de surfear en su ola positiva firmando una tercera victoria consecutiva sobre el césped de Angers. No se equivoquen al respecto: aunque este partido parecía un choque de extremos sobre el papel entre los líderes parisinos y la linterna roja de Angers, Christophe Galtier y sus hombres no tenían intención de subestimar a un oponente que se movió sin presión en este último sprint. El técnico del Paris Saint-Germain también había ideado un atractivo titular, encabezado por la virtuosa dupla Messi-Mbappé en ataque.

Más allá de consideraciones puramente contables, todo el desafío de este viaje al oeste también consistió en constatar las buenas disposiciones de nuestra Roja y Azul. Ante un SCO empeñado en hacer el partido de su temporada para ocultar la realidad de la clasificación por una noche, los parisinos tenían el deber de hacer valer su rango. ¡Eso es lo que hicieron con el apetito de un campeón! Y como la semana pasada, ¡fue del tándem Messi-Mbappé que salió la luz! En una combinación perfecta, el argentino destiló una soberbia apertura a Juan Bernat cuyo lanzamiento de primera intención encontró a Kylian Mbappé que, en dos tiempos, deslizó el cuero al fondo de la red (0-1, 9º).

Un escenario ideal para los de Christophe Galtier, que supieron hacerse con el balón y aumentar la presión para intentar la ruptura. A la hora de los postres, también sacaríamos el talón de Mbappé para servir a Messi, en la entrada a superficie de Bernardoni (21). ¡Un pequeño caramelo que no podrás rechazar! ¡Especialmente porque los dos hombres iban a volver a poner la tapa! Sobre un nuevo caviar de Leo Messi, Kylian Mbappé desconcertó a Bernardoni al borde del fuera de juego para ir a por su doblete (0-2, 25º). ¡Clínica!

Con esta ventaja al descanso, nuestros parisinos habían hecho la parte más difícil. El entrenador parisino también aprovechó para revivir a Marco Verratti en el campo a la hora de juego, pero enfrente, el SCO no había dicho su última palabra. Y en una última ofensiva, los locales redujeron finalmente la distancia por medio de Thioub (1-2, 87º). Una rebaja en el marcador que quedará en el anécdota, conservando la Rojiazul este preciado éxito hasta el pitido final.

Lo principal está hecho para los parisinos, que firman así un tercer éxito consecutivo para aumentar temporalmente su ventaja al frente de la clasificación, con once puntos de ventaja sobre el rival marsellés, antes del Olympico del domingo. Una buena operación que permite al Paris Saint-Germain plantearse la continuación de este sprint final con confianza y serenidad.

psg.fr