A pocas jornadas del arranque de La Vuelta en Lisboa, se reinicia la actividad del equipo masculino de Movistar Team con una 46ª Vuelta a Burgos que presenta numerosos e interesantes cambios. Vuelve la contrarreloj individual a una ronda castellana que verá su general decidirse en los casi diecinueve kilómetros entre Santa María del Campo y Pampliega, el jueves 8 de agosto (cuarta etapa).
Antes vendrán los dos finales en alto, consecutivos, de la carrera: el rampón de Ojo Guareña (martes 6, segunda etapa) y unas Lagunas de Neila diferentes (miércoles 7, tercera etapa), ya que este año la meta se queda en El Portón, evitando el último kilómetro y medio de subida, lo que deja las rampas más duras -más de 2 km a casi un 12%- justo antes de la llegada.
La prueba, por su parte, terminará el viernes 9 nada menos que en Treviño, enclave al cual se llegará con un bucle final que cubrirá bastantes kilómetros en carreteras alavesas y que dejará a la caravana lo más cerca posible de Euskadi. Al día siguiente se corre la Clásica de San Sebastián -cambio obligado por los Juegos Olímpicos-, lo que logísticamente será muy de agradecer.
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