Un doblete de Lewandowski y los goles de Iñigo Martínez, Raphinha y Fermín permiten a los culés sumar la tercera victoria en cuatro partidos y asaltar las ocho primeras posiciones de la tabla

El FC Barcelona se muestra intratable. Da igual si el escenario es mítico, si hace frío o si la afición presiona de lo lindo. Nada asusta a este equipo, que se muestra fiel a su idea de juego y continúa en su línea ascendente. Porque el equipo de Hansi Flick no tenía un reto fácil, pero este miércoles ha derrotado al Estrella Roja en el Rajko Mitic Stadium de Belgrado (2-5). El ‘Pequeño Maracaná’, lleno hasta la bandera, ha visto como un doblete de Lewandowski y los goles de Iñigo Martínez, Raphinha y Fermín han dejado en nada los intentos de los de Vladan Milojevic, que lo han intentado e incluso han hecho el empate mediante Silas, pero se han visto superados. De esta forma, y ​​después de los resultados de esta jornada, el Barça sigue escalando en la clasificación general y ya se encuentra entre las primeras 8 posiciones, con nueve puntos de doce posibles en cuatro jornadas.

Iñigo Martínez abre la lata

Tal y como se preveía, lo que se ha visto sobre el terreno de juego ha sido lo esperado: un Barça con el dominio, el control y la posesión y un Estrella Roja que se ha mantenido bien replegado buscando su oportunidad por velocidad y a la contra. Sólo faltaba ver cuál de las dos ideas ganaba la partida en Belgrado.

De hecho, el partido ha comenzado con un gol anulado por fuera de juego al Estrella Roja, en lo que está siendo habitual esta temporada en Can Barça (min 4). Pero, a partir de ahí, el juego se ha decantado hacia la portería de Marko Ilic. Con el control absoluto, el primer gol del Barça ha llegado a balón parado, una parte del juego que también está funcionando. Esta vez, Raphinha ha picado una falta al interior del área e Iñigo Martínez, con un gran cabezazo, ha abierto la lata con un remate cruzado y perfecto (0-1, min 12).

Sin embargo, y cuando el Barça tenía el partido bien controlado, una jugada rápida y al primer toque del Estrella Roja ha sido aprovechada por Silis que, esta vez sí, ha ganado la espalda de los culés y ha acabado con el empate (1-1, min 27). A pesar de todo, ante este escenario el Barça no se ha puesto nervioso y ha tirado de paciencia. Ha sido ya prácticamente sobre el descanso cuando Lewandowski, tras un disparo de Raphinha que se ha topado contra la base del palo, ha aparecido para aprovechar el rechace y avanzar de nuevo a los culés (1-2, min 43).

Aparece el Kounde más asistente

El gol y el resultado ha hecho justicia a lo visto sobre el terreno de juego en el primer tiempo. Pero es que además los primeros minutos de la reanudación han terminado de acercar, y mucho, el enfrentamiento. Porque Lewandowski ha hecho su segundo gol de la noche, el 700 del Barça en la Copa de Europa, después de un centro de Kounde y un remate desde el segundo palo (1-3, min 53). Dos minutos después, una nueva asistencia de Kounde también ha acabado en gol, aunque esta vez quien ha rematado de primeras (y desde fuera el área) ha sido Raphinha (1-4, min 55).

Un gol que ha roto un récord que duraba 64 años, porque desde la temporada 1959/60 que el Barça no marcaba cuatro o más goles en tres partidos seguidos en la Champions. Marcador ya muy difícil para el Estrella Roja. Y ya imposible cuando una nueva asistencia de Kounde, la tercera de la noche, ha sido rematada por Fermín, que ha consumado la manita (1-5, min 76).

Felício Milson ha reducido diferencias, cierto (2-5, min 84), pero el resultado ya era demasiado claro a favor de los culés, que han sumado otros tres puntos. Este Barça, pues, una vez más ha demostrado seguir con paso firme. En Europa ya son 9 de 12, pero esto no acaba aquí. Próximo reto, el Brest.

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