Esta área protegida se encuentra al cuidado de Parques Nacionales Naturales de Colombia, sus características particulares y únicas hacen que sea considerada como un oasis dentro de la región de la Alta Guajira. Con el apoyo de la cooperación alemana construyó infraestructura ecoturística liviana, que ha favorecido entre otros actores, a las familias de las comunidades Wayúu en la actividad de interpretación del patrimonio.
Por: Miguel Ángel Pachón Muñoz KfW – PNNC
En medio de la aridez de las arenas amarillas del desierto más grande de Colombia, en la alta Guajira, brota un conjunto de montañas verdes, una majestuosidad única en el planeta conocida como Serranía de la Macuira, constituye un ecosistema sin otro de su especie en Colombia por poseer bosques de niebla a tan solo 550 mts de altura y a menos de 5 Km de zonas desérticas.
La serranía ubicada más al norte de Suramérica da origen al Parque Nacional Natural de Macuira, en jurisdicción del municipio de Uribia, departamento de La Guajira, abarca territorios de cuatro corregimientos: Waletpa, Nazareth, Tawaira, y Siapana, con una extensión de aproximadamente 24.103 hectáreas y caracterizado por su estado de traslape con más de 41 territorios de clanes del resguardo Wayuu de la Alta y Media Guajira. Presenta alturas desde los 50 metros por el sector Siapana (Jiwonnee), hasta los 865 metros en el macizo septentrional de Paaluwa, que es el punto más alto de la serranía.
Esta área protegida comparte territorio indígena Wayuu con Venezuela, otorgándole un carácter claramente fronterizo. Su importancia ecológica radica en su papel fundamental en la provisión de servicios ecosistémicos, en particular en la preservación del recurso hídrico y la biodiversidad, puesto que este lugar representa la principal fuente de agua en la zona norte extrema de la Alta Guajira. Igualmente se constituye como un refugio de vida silvestre y patrimonio cultural para el pueblo Wayuu.
El parque nacional natural posee características magistrales particulares y únicas, todo en un solo lugar: la magnitud y hostilidad de los finos arenales del desierto, la Serranía de la Macuira, considerada como un oasis dentro de la región de la Alta Guajira; la presencia de paisajes únicos como el bosque de niebla en medio del desierto y las Dunas o Médano de Aleewolu’u, cuya forma, color y composición resaltan como atractivo singular dentro del paisaje de bosque seco de montaña; al igual que las rocas cargadas de historia con pictogramas que relatan la existencia de un antepasado remoto y las bateas (pozos de agua en riachuelos) que en temporada de lluvia se prestan para satisfacer a los visitantes y habitantes de un refrescante baño natural con agua dulce, hacen de este territorio un lugar majestuoso.
Otro aspecto que reviste gran importancia es la cultura Wayuu, históricamente una de las comunidades indígenas del país con más arraigo en términos de tradiciones, territorialidad y lengua propia, lo cual convierte a esta área protegida en un espacio interesante de relacionamiento con los visitantes nacionales y extranjeros con quienes comparten la forma de vivir, su visión sobre el mundo, tradiciones, costumbres y artesanías como las mochilas, chinchorros y las sandalias tradicionales llamadas waireñas, que acompañan los pasos del pueblo wayuu, siendo muy reconocidas por sus tejidos, diseños, colores y manufactura representan una conexión con los ancestros, con los saberes y la realidad del territorio, ya que tanto las niñas como los niños aprenden de sus abuelos los tejidos y con ellos la cosmovisión, la historia desde sus raíces como indígenas.
El apoyo de la cooperación alemana
Durante el año 2019, el PNN de Macuira adoptó junto con las autoridades tradicionales y la comunidad wayuu, su instrumento de planeación y manejo denominado Régimen Especial de Manejo y su estrategia de planificación del ecoturismo -Plan de Ordenamiento Ecoturístico POE-, el cual cuenta con un Plan Estratégico que contempla actividades entre las que se destacan el diseño e implementación de senderos interpretativos a lo largo de la zona O’unajaalee (sector Anuwapa), actividad que forma parte del objetivo específico orientado a Diseñar e instalar el equipamiento turístico necesario que coadyuve a la funcionalidad del sendero interpretativo del PNN de Macuira con la finalidad de atender las necesidades de interpretación, mejorando la calidad del servicio y el nivel de satisfacción del visitante.
Para este fin y con recursos de la cooperación financiera alemana, a través del Banco de Desarrollo KfW, en el marco de la implementación de la fase I del Programa Áreas Protegidas y Diversidad Biológica, en el año 2022, se diseñó e instaló una infraestructura ecoturística liviana, que ha favorecido entre otros actores, a las familias de las comunidades wayúu, en la actividad de interpretación del patrimonio, por lo cual, las obras ejecutadas contemplaron puntos estratégicos que resaltan atractivos y zonas que fueron caracterizadas en el ejercicio de construcción conjunta del POE del área protegida.
Mediante este apoyo, para el sector nororiental del área protegida, corregimiento de Nazareth, fueron instalados puntos ecológicos, una pasarela, una zona de descanso y dos miradores ubicados como factor integrador con el sendero que conduce al atractivo focal Dunas Alewolu’u, con la intención de incentivar la calidad de la experiencia en la visita. Estas infraestructuras fueron instaladas con el objetivo de mejorar la prestación de servicios asociados a los atractivos ecoturísticos.
De igual manera, en la zona intermedia de dicho sendero en cercanías al atractivo Piedra de Worunka, se instaló una pasarela que permite el paso de visitantes en las temporadas de lluvia, al igual que un mirador que brinda una vista lejana de las dunas y el arroyo Wotkasainsru; un descansadero en la zona provista de árboles y sombra en Shishiimana (sector del territorio clanil Isijo´u), y un mirador hexagonal de 6 metros de altura instalado en las dunas que permite una vista panorámica del paisaje y ecosistemas asociados al atractivo ecoturístico. Cabe mencionar que cada punto incluyó un sistema de señalética de orientación y de mitigación de impactos asociados al riesgo de la actividad de senderismo.
De esta forma y con el apoyo de la cooperación alemana, el Parque Nacional Natural de Macuira, le ha apostado al ecoturismo como una acción de manejo conjunta con las comunidades indígenas wayuu que viven en territorios traslapados con el área protegida, constituyéndose en una alternativa viable hacia el aprovechamiento de elementos de la naturaleza que contribuyen al logro del interés común de la conservación en los territorios traslapados.
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