El diez veces campeón se enfrentará al portugués Faria en 2R

Hay victorias que pueden ayudar a cambiar tendencias y es probable que la de este lunes en primera ronda del Abierto de Australia sea una de ellas para Novak Djokovic, que logró reponerse a un exigente debut para seguir adelante en Melbourne Park.

El diez veces campeón del torneo remontó en su estreno en esta edición en la Rod Laver Arena al invitado estadounidense de 19 años, Nishesh Basavareddy, por 4-6, 6-3, 6-4, 6-2, en dos horas y 58 minutos.

Djokovic llegaba a Melbourne, después de caer en semifinales de Brisbane frente a Reilly Opelka, y con la intención de rearmar su tenis de la mano de Andy Murray. El antiguo No. 1 del PIF ATP Rankings lo acompaña desde el banquillo en el primer Grand Slam de la temporada como un miembro más de su equipo.

“Estoy encantado de tenerlo en mi banquillo”, señaló Djokovic sobre Murray. “Fue un poco extraño tenerlo en mi box. Nos enfrentamos muchas veces durante más de 20 años y es genial tenerlo en el mismo lado de la red”.

“Me dio grandes consejos en mitad del partido. Es muy bueno que tengamos la oportunidad de intercambiar sensaciones y que nuestros entrenadores nos digan lo que ven. Ha sido una gran experiencia [con Murray], espero que no quede aquí”.

Para lograrlo tuvo que emplearse a fondo, porque el joven americano de la #NextGenATP le exigió desde el inicio del encuentro. Basavareddy propuso un partido largo, jugando con descaro ante el 24 veces campeón de Grand Slam en la pista central del torneo en el primer choque que registraba el Lexus ATP Head2Head entre ambos.

Un 81% de puntos ganados con el primer servicio, 16 golpes ganadores y un quiebre convertido en dos oportunidades decoraron una estadística que obligaba a Djokovic a jugar como mínimo cuatro sets, algo que sólo le había ocurrido en la primera ronda en dos ocasiones anteriormente desde 2007 con Dino Prizmic (2024) y Jan-Lennard Struff (2020).

El serbio no hallaba la fórmula para sofocar el desparpajo de Basavareddy, rápido de piernas y con la confianza de haber firmado las semifinales —tras superar la previa— la pasada semana en Auckland.

El estadounidense aguantó hasta que Djokovic se situó con 4-3 y ventaja en el segundo set. Fue ahí donde acompañado de un estruendoso alarido cambió el signo del encuentro. El balcánico firmó su primer break y cerró a continuación el segundo set con su saque. A partir de entonces tomó el control

Djokovic elevó hasta 23 la cifra de saques directos y para un total de 51 golpes ganadores. No volvió a sufrir con su servicio —no concedió una sola opción de quiebre más— y puso rumbo a segunda ronda dejando su récord en el torneo en 95-9.

Su próximo reto al otro lado de la red será el portugués Jaime Faria, que este lunes firmó la primera victoria de su carrera. El No. 125 del mundo, que superó la fase previa en Melbourne, derrotó en primera ronda a Pavel Kotov por 6-1, 6-1, 7-5.

¿Sabías que…?
Novak Djokovic ha ganado 16 de los 17 partidos que ha jugado con un invitado en un Grand Slam, siendo su única derrota la que registró en segunda ronda de 2017 frente a Denis Istomin. Aquel fue también el partido que perdió ante el rival peor clasificado (No. 117 del PIF ATP Rankings) en un torneo de esta categoría.

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