La presidenta de la COP16 de Biodiversidad de Naciones Unidas, Susana Muhamad, destacó este viernes que la conferencia fue una cita «histórica» que logró cumplir el 100 % de sus objetivos y alcanzar acuerdos que no se habían conseguido en 30 años.

«Ha sido calificada por los países como una COP histórica», señaló Muhamad, ministra de Ambiente de Colombia, en un mensaje en vídeo publicado en su perfil de X, horas después de que las negociaciones en Roma se cerrasen con un acuerdo.

La COP16 se realizó en Cali (Colombia) en noviembre de 2024, pero no se logró un consenso debido a la falta de quorum, por lo que esta semana se retomaron las negociaciones en la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Roma.

Este segundo intento sí acabó con éxito y la organización anunció anoche que se había cerrado, entre otros puntos, el primer plan global para financiar la conservación de la naturaleza.

Son acuerdos «que no se habían podido hacer en 30 años», refirió Muhamad, pero necesarios para implementar el Marco Global de Biodiversidad Kunming-Montreal, un histórico acuerdo firmado en 2022 establece 23 objetivos de protección de la biodiversidad para cumplir de aquí a 2030.

La presidenta de la COP16 resaltó especialmente la creación del fondo dedicado para la Convención, una propuesta que permite «tener una capacidad de financiamiento de la biodiversidad adecuada para las necesidades del cuidado de la vida».

El pacto movilizará 200.000 millones de dólares anuales hasta 2030.

Muhamad también destacó el plan de monitoreo, con «indicadores muy técnicos y específicos» para medir el avance de los 23 objetivos, y cómo se va a reportar a la ciudadanía sobre el cumplimiento del Marco Global.

«Colombia ha ejercido un proceso de ser anfitrión y de Presidencia que ha sido calificado por las mismas partes el Convenio como histórico», concluyó la ministra.

La Comisión Europea destacó este viernes que el acuerdo alcanzado en las negociaciones de la COP16 en Roma para financiar la conservación de la naturaleza en un momento caracterizado por la fragmentación en las relaciones internacionales demuestra que «el multilateralismo funciona».

«Hemos logrado una hoja de ruta global para financiar la biodiversidad después de 2030. Esto es una prueba de que el multilateralismo funciona a pesar del complicado contexto geopolítico internacional o los múltiples desafíos globales», afirmó en un comunicado la comisaria de Medioambiente, Jessika Roswall.

La política sueca señaló que «los argumentos ecológicos y económicos para la cooperación siguen siendo obvios» y recordó que «la pérdida de biodiversidad es un problema acuciante global» que «empeora el impacto del cambio climático y destruye la vida de los ciudadanos».

Para Roswall, los acuerdos alcanzados en Roma «muestran que la comunidad global eligió reunirse para detener y revertir la pérdida de biodiversidad a pesar del entorno geopolítico fragmentado» y además lo hizo «con espíritu de compromiso, apertura y flexibilidad».

En este sentido, calificó como «crucial» que ahora la comunidad internacional mantenga el «impulso» para implementar el Marco Global para la Biodiversidad» y enfatizó que los países deben ahora revisar sus estrategias nacionales y planes de acción sobre biodiversidad incluyendo metas nacionales en este ámbito.

En la misma línea, garantizó que la UE «seguirá trabajando con otros países del mundo para encontrar soluciones y seguir implementando este histórico acuerdo hasta 2030 y después» de dicho año.

Los 150 países reunidos en Roma alcanzaron el primer plan global para financiar la conservación de la naturaleza, después de tres días de intensas negociaciones en el marco de la COP16 de Biodiversidad ampliada de Naciones Unidas.

La COP16 llegó esta semana a la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Roma después de una primera conferencia en Cali (Colombia) en noviembre de 2024 que acabó sin acuerdo debido a la falta de quorum.

Según las delegaciones, el acuerdo sobre la financiación de la protección de la naturaleza era la pieza clave de la reunión con el objetivo del poder implementar el Marco Global de Biodiversidad Kunming-Montreal.

Este histórico acuerdo, firmado en 2022, establece 23 objetivos para cumplir de aquí a 2030, como proteger un 30 % de la superficie terrestre y marina o destinar 200.000 millones de dólares a conservar la biodiversidad, de los cuales 30.000 serían ayudas de los países desarrollados a los que tienen menos recursos (frente a unos 15.000 millones de 2022).

El compromiso, encabezado por la Unión Europea, Canadá y Japón – en ausencia de Estados Unidos que no ha acudido a Roma – permite liberar recursos económicos en un plan de trabajo de cinco años para los países en desarrollo y así reducir la degradación de la biodiversidad.

La COP16 consiguió ya el pasado martes la puesta en marcha del llamado Fondo Cali, un mecanismo financiero destinado a la protección de la biodiversidad que involucra de manera directa al sector privado, que ahora podrá canalizar contribuciones para compensar el uso de información genética obtenida de forma digital. EFE