El español medirá a Altmaier en la tercera ronda
Carlos Alcaraz quiere escribir la historia en el Rolex Monte-Carlo Masters, uno de los torneos más emblemáticos del ATP Tour donde su cuaderno de gestas permanecía en blanco. El español sumó este miércoles la primera victoria de su carrera en la arcilla del Principado, punto clave del calendario sobre una superficie en la que aspira a escribir grandes leyendas. A orillas del Mediterráneo, un entorno que conoce desde la cuna, el murciano encontró a tiempo la sonrisa.
El No. 3 del PIF ATP Rankings tuvo que desenredar un partido repleto de curvas, volteando por 3-6, 6-0, 6-1 el marcador a Francisco Cerúndolo para aterrizar en el torneo. La fortaleza del jugador argentino, uno de los tenistas con golpes más duros del vestuario en el fondo de la pista, sirvió para poner a prueba la dura mentalidad del español. Tras una primera manga descontrolada, la velocidad de piernas de Alcaraz emergió para recordar una cosa: el vigente campeón de Roland Garros es el hombre a batir sobre tierra batida, incluso en escenarios sin éxitos previos.
«No he empezado bien. He cometido muchos errores y le he permitido jugar dentro de pista, dominando los puntos», dijo Alcaraz, que acumula un 16-4 en 2025. «Sabía que necesitaba algo diferente, jugar con más agresividad y hacer mi propio tenis: dejadas, subir a la red y ser más ofensivo. El cambio más importante vino al resto, intenté restar más cerca de la línea y presionarle».
En un cuadro donde figura la plana mayor del ATP Tour, Alcaraz intentará seguir acercándose a las rondas definitivas acumulando un trabajo sólido sobre la arcilla. El español medirá en los octavos de final al alemán Daniel Altmaier, que este miércoles derrotó por 7-5, 5-7, 6-2 al veterano Richard Gasquet, poniendo punto final a la última participación del francés en el torneo.
Alcaraz busca extender una carrera repleta de éxitos en ATP Masters 1000. El español, que acumula cinco trofeos en la categoría dorada del ATP Tour, solamente había participado en una ocasión sobre la arcilla de Montecarlo, cayendo en su primer partido en la edición de 2022. Ahora, con el impulso del triunfo inicial, em murciano aspira a cambiar el guión en uno de los torneos con mayor aroma histórico del calendario.
El español afronta en Montecarlo el primer torneo sobre tierra batida de 2025, una temporada en la que levantó la copa en el ATP 500 de Róterdam, alcanzó los cuartos de final en el Abierto de Australia y escaló hasta las semifinales del ATP Masters 1000 de Indian Wells como resultados más destacados. Alcaraz aterriza en el Principado tras ceder en la primera ronda de Miami, una derrota prematura que le ha otorgado tiempo adicional para asumir el cambio de superficie.
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