El inusual respaldo ofrecido ayer por el Papa a las reglas climáticas de Estados Unidos le dio al presidente Obama un apoyo extraño para un programa que está siendo atacado por los republicanos que aspiran a ocupar la oficina más importante del país. Aún así, algunos expertos se han manifestado en contra de explotar el mensaje del Pontífice para ganar capital político.

El papa Francisco dijo que es “motivador” que Obama esté enfocándose en la “contaminación del aire”. Esto fue ampliamente interpretado como una referencia al Plan de Energía Limpia, el cual busca recortar en 32% las emisiones causadas por la generación de electricidad en los próximos 15 años.

Esto provocó la celebración de algunos ambientalistas. Mary Anne Hitt, directora de la campaña Sierra Club’s Beyond Coal, dijo “wow” en un tuit acerca de los comentarios del Papa. “Apenas lo estoy asimilando”.

Mientras tanto, los principales candidatos presidenciales del partido republicano se mantuvieron en silencio. Los comités de campaña de Donald Trump, Carly Fiorina y el senador Marco Rubio (republicano por el estado de Florida), entre otros, no respondieron a la solicitud de comentarios.

El mensaje papal de ayer difiere pronunciadamente de la visión de algunos de esos candidatos.

Rubio dijo este mes que si era electo revertiría el Plan de Energía Limpia, argumentando que es “una de las regulaciones más costosas jamás creadas” y que tendría “poco o ningún beneficio ambiental”.

Eso parece contrastar con la evaluación del Papa de que el Plan de Energía Limpia representa una nueva “urgencia” para actuar sobre el cambio climático.

“Aún tenemos tiempo de hacer el cambio requerido para hacer posible un desarrollo sostenible e integral, porque sabemos que las cosas pueden cambiar”, dijo el papa Francisco ayer en la Casa Blanca. “Este cambio pide que reconozcamos seria y responsablemente, no solo el tipo de mundo que podríamos estar dejándole a nuestros niños, sino también a los millones de personas que viven bajo un sistema que los ha ignorado”.

No obstante, algunos expertos que han estado revisando cuidadosamente las palabras del Papa acerca del clima no están en de acuerdo con que se trate de un apoyo que el líder católico le está ofreciendo al Plan de Energía Limpia.

“Es bastante inusual para un Papa mencionar algo tan específico”, dijo Anthony Annett, asesor de cambio climático y desarrollo sostenible del Instituto de la Tierra en la Universidad de Columbia, y quien también está afiliado a la organización sin fines de lucro Religiones para la Paz.