Gael Monfils dejó a los fans en la Margaret Court Arena con sus mandíbulas en el piso el lunes en el Abierto de Australia, superando a Andrey Kuznetsov con su sello distintivo: un tenis espectacular y exuberante.
El francés, favorito número 23, se impuso por 7-5, 3-6, 6-3, 7-6 (4) en dos horas y 37 minutos, disparando 44 tiros ganadores y 14 aces. Convirtió tres de siete oportunidades de quiebre y recorrió 2131.8 metros en total, incluyendo algunos en el aire en el segundo set.
Monfils hará su primera aparición en los cuartos de final en el Abierto de Australia en su 11ma aparición en este evento. Es la segunda mayor cantidad de intentos antes de llegar a los cuartos de final en Melbourne por primera vez, con su compatriota Fabrice Santoro logrando llegar a esta instancia después de 14 intentos.
Con determinación avanza el segundo cabeza de serie en Melbourne Park. Andy Murray ha accedido a los cuartos de final del Abierto de Australia a toda mecha, superando la resistencia del local Bernard Tomic por 6-4 6-4 7-6(4) tras una hora y 28 minutos de juego. En un major donde acumula cuatro trofeos de subcampeón, una prueba de su regularidad (presente en la antepenúltima ronda sin falta desde 2010), una rivalidad intacta (colocó el 4-0 en el cruce directo ante el rival australiano) y una cifra de consideración (alcanzar 25 veces los cuartos de final en Grand Slam). Mimbres sólidos para llegar a las rondas decisivas.
En el choque de octavos de final, Murray presentó una versión solvente volcada hacia el tenis ofensivo. Sus 18 aces y un 81% de aprovechamiento con primer servicio evidenciaron autoridad al colocar la pelota en circulación. En la devolución, un 67% de puntos ganados sobre el segundo saque de Tomic condujeron a seis roturas de servicio, suficiente para caminar con viento a favor en todo momento hasta inclinar la victoria de su lado.
El canadiense Milos Raonic se adjudicó el encuentro de cuarta ronda ante el No. 4 del Mundo Stan Wawrinka por 6-4, 6-3, 5-7, 4-6, 6-3 en tres horas y 44 minutos el lunes en Melbourne.
El primer parcial fue una igualada contienda en la que el jugador que se encontraba en el turno de saque no concedía oportunidad alguna a su rival. Hasta que llegó el noveno juego, no se había presentado ni una sola oportunidad de break en el encuentro. Y la oportunidad llegó para un Raonic más acertado que supo aprovechar su única opción para tomar ventaja en el marcador.
Todas las precauciones a la hora de conservar el saque por parte de los contendientes se vino abajo casi al inicio del segundo set, cuando Wawrinka rompió el saque del gigante canadiense en el segundo juego del parcial para lograr una ventaja de 2-0. Pero tardó poco Raonic en darle la vuelta al marcador con dos quiebres consecutivos en el tercer y quinto game y conseguir 4 juegos seguidos para una ventaja de 4-2. Después del bache inicial, el canadiense logró mejorar sus estadísticas con el arma más poderosa de su juego: el saque. Milos consiguió cerrar el segundo set con otro quiebre y lograr una espléndida marca de 10 de 10 en puntos ganados al primer saque, con 5 aces.
Los cuartos de final se jugaran así…
