Más de un millar de variedades colombianas, tanto de la flora como de la fauna, permanecen hoy amenazadas debido al deterioro de sus hábitats naturales y al tráfico ilegal.

De esas mil 203 especies cuya supervivencia peligra, 173 están en riesgo crítico, precisó el portal digital El Nuevo Siglo.

Colombia, que clasifica entre los países más biodiversos, atesora cinco Reservas de la Biosfera y más de medio centenar de áreas protegidas.

Sólo el trasiego ilegal atenta contra las poblaciones de unos 234 tipos de aves, 76 de mamíferos, 27 de reptiles y nueve de anfibios, comentó el periódico bogotano que mencionó a los tigrillos, micos, guacamayas y osos perezosos entre los frecuentes blancos de ese flagelo.

ANFIBIOS

Otros de los fenómenos que lesionan el patrimonio natural del país son la introducción de ejemplares exóticos invasores, la ampliación de la frontera agrícola, además de la transformación y fragmentación de los hábitats, junto a los efectos del acelerado cambio climático.

En un mensaje al país el ministro de Ambiente, Gabriel Vallejo, pidió proteger los ecosistemas con todos sus pobladores ya sean del reino botánico o animal y condenó recientes actos de violencia contra los osos andinos (de anteojos) y otras criaturas.

Hago un llamado a los colombianos para preservar nuestra flora y fauna, los invito a denunciar cualquier atentado contra la naturaleza, es un delito que puede acarrear desde sanciones económicas hasta penas privativas de la libertad, recordó el experto.

Vallejo solicitó apoyo para las autoridades ambientales en cada región a fin de detener el comercio ilícito de especies y cualquier hecho punible en ese ámbito.

Colombia abriga a la mayor colección de orquídeas del mundo y más de mil 900 variedades de aves.