Bastian Schweinsteiger ha comunicado el viernes 29 de julio al seleccionador alemán Joachim Loew que no continuará en el entramado nacional. El capitán de la Mannschaft disputó un total de 120 partidos con los vigentes campeones del mundo.

«Jogi Loew sabía lo importante que era para mí la Eurocopa de 2016 en Francia. Quería ganar ese título a toda costa, porque es un trofeo que no hemos vuelto a conquistar desde 1996. Pero no pudo ser y tengo que aceptarlo», declaró el centrocampista de 31 años del Manchester United.

«La consecución del Mundial de 2014 fue un logro histórico y muy emotivo, algo irrepetible en mi carrera. Por eso creo que es lo correcto y lo razonable poner punto final en este momento y desearle todo lo mejor a mis compañeros de cara al clasificatorio para la Copa Mundial de 2018», añadió.

Schweinsteiger recaló a los 13 años en las categorías inferiores del FC Bayern de Múnich. En 2002 hizo su debut profesional y, ese mismo año, se estrenó también en la Liga de Campeones de la UEFA. Con el equipo bávaro conquistó ocho Ligas y siete Copas alemanas (ambos registros suponen un récord nacional), y en 2013 ganó la Liga de Campeones de la UEFA, la Supercopa de la UEFA y la Copa Mundial de Clubes de la FIFA. A mediados del año pasado fichó por el Manchester United, club con el que triunfó este año en la Copa de la FA.

Figura esencial del cuento de verano

Schweinsteiger debutó con la selección absoluta en la antesala de la Eurocopa de la UEFA 2004, en un amistoso contra Hungría saldado con derrota (0-2). Ya en la fase final de Portugal, el centrocampista participó en los tres partidos de una liguilla que Alemania fue incapaz de superar.

En el cuento de verano de la Copa Mundial de la FIFA 2006™, escenificado en su país, Schweinsteiger tuvo un papel más destacado, aunque entonces jugaba todavía pegado a la banda. Fue titular en seis de los siete partidos de los suyos y, en la semifinal en la que Alemania cayó en la prórroga ante Italia, posterior campeona del torneo, entró en sustitución de un compañero. En el partido por el tercer puesto contra Portugal (3-1), Schweinsteiger anotó dos goles, originó el tanto en propia meta de Petit y fue elegido mejor jugador del encuentro.

En las Eurocopas de 2008 (donde Alemania cayó en la final ante España) y 2012 (de nuevo eliminación en semifinales a manos de Italia), Schweinsteiger fue una das las figuras claves del equipo, pero fue principalmente en las posteriores dos ediciones de la Copa Mundial de la FIFA™ donde se erigió en el motor del combinado germano.

Cuando Louis van Gaal llegó al Bayern en la temporada 2009/10, decidió situar a Schweinsteiger como mediocentro defensivo, una posición que no ha abandonado desde entonces. En esta demarcación alcanzó su máximo nivel, y también comenzó a jugar en la medular con la selección. En la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010™, Schweinsteiger fue uno de los timones de un joven entramado alemán, cuyo potencial no se supo apreciar en toda su expresión antes del certamen.

Pero Alemania, con un estilo de juego fresco y desenfadado, cosechó triunfos importantes a costa de Inglaterra (4-1 en octavos de final) y Argentina (0-4 en cuartos de final), antes de caer 0-1 en semifinales ante España, que acabó ciñéndose la corona mundialista.

El momento estelar en Río

Según ha manifestado el propio Schweinsteiger en su despedida, el punto álgido de su carrera llegó cuatro años más tarde, concretamente en la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™. La selección alemana, un equipo ya maduro, llegó como un vendaval hasta la final de Río de Janeiro. En la semifinal contra Brasil, la Mannschaft arrolló 1-7 al combinado anfitrión y firmó uno de los partidos más memorables de la historia del fútbol.

En la instancia decisiva, Alemania se impuso 1-0 en la prórroga a Argentina con una de las actuaciones más destacadas que se recuerdan de Schweinsteiger, y obtuvo así su cuarta estrella mundialista. Al término del torneo, el centrocampista heredó el brazalete de capitán de manos de Philipp Lahm.

La derrota por 0-2 en la semifinal de la Eurocopa de la UEFA 2016 contra Francia, anfitriona del torneo, significó el 120º encuentro de Schweinsteiger con su selección, con la que anotó 24 goles. El jugador bávaro ocupa el cuarto lugar en la clasificación histórica de jugadores alemanes con más internacionalidades, por detrás de Lothar Matthaeus (150 partidos), Miroslav Klose (137) y su gran compañero de fatigas en la selección, Lukas Podolski (129).

En el clasificatorio para la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018™, y ya sin su eterna figura, Alemania se medirá en el Grupo C a la República Checa, Irlanda del Norte, Noruega, Azerbaiyán y San Marino. Además, los vigentes campeones del mundo tendrán que elegir ahora un nuevo capitán que los guíe en la Copa FIFA Confederaciones Rusia 2017.