El Real Madrid cumplió su primer objetivo en la búsqueda hacia un nuevo título de Liga y volvió de Anoeta con los tres puntos. Los blancos dominaron el encuentro desde el primer minuto gracias al temprano gol de Bale y plasmaron sus buenas sensaciones con el golazo posterior de Asensio. Bale cerró el marcador en la última jugada. Este brillante estreno liguero permite además que Zidane siga invicto a domicilio en esta competición.
El primer paso para el triunfo lo dio Bale, que no faltó a su cita con el gol en Anoeta e inauguró el marcador madridista en esta Liga en el primer ataque blanco. El galés cabeceó de manera espléndida un centro de Carvajal, para lograr su cuarto tanto en su cuarta visita al estadio donostiarra
El segundo gol madridista llego en el 40’. Varane puso un gran pase en largo a Asensio que, cara a cara con Rulli, definió con una magnífica vaselina. El centrocampista sigue su racha goleadora al marcar en los dos partidos oficiales que ha jugado con el Real Madrid.
En los últimos minutos, los locales aumentaron su intensidad para reducir la diferencia y el partido se embarulló un poco, pero la defensa madridista no perdió la concentración y Casilla apenas tuvo que intervenir. En la última jugada del partido, Bale cerró esta brillante victoria al aprovechar un pase en profundidad de James y marcar tras salvar la salida del meta de la Real. Ya toca pensar en el Celta.