A los azules infinitos del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, se le sumaron nuevos colores durante el mes de septiembre. Primero fue en Providencia y Santa Catalina, donde siete estudiantes pintaron un mural para enviarle un mensaje a sus habitantes sobre la urgencia de conservar al Caracol pala (Strombus gigas), la Langosta del Caribe (Panulirus argus) y el Cangrejo negro (Gecarcinus ruricola), así como otras especies marinas amenazadas. A la cruzada artística por estas especies, se unieron 14 estudiantes de la Institución Educativa El Carmelo, ubicada en el barrio Rock Hole, en San Andrés Isla.
Jóvenes entre los 11 y 15 años participaron de un taller inicial de sensibilización, dirigido por profesionales de WWF-Colombia, acerca de la importancia de estas especies en los ecosistemas marinos del Archipiélago, los riesgos y amenazas que les generan la sobrepesca y la contaminación, y las acciones que ellos pueden emprender para contribuir a la sostenibilidad de estas formas de vida marina.
Seguidamente, con David Álvarez (Beek), artista y grafitero bogotano que hace parte del Colectivo Mano Amiga, los jovencitos aprendieron a hacer su firma en técnica de grafiti, y construyeron juntos la idea de lo que a la jornada siguiente empezaría a hacer un mural para la comunidad de Rock Hole. Cinco galones de pintura fueron necesarios para cambiarle la cara a un muro de 13 metros de ancho por 2,5 metros de alto, ubicado en el parque de este barrio isleño, donde los protagonistas son tres simpáticos cangrejos negros, acompañados de un caracol pala y una langosta espinosa.