La reunión del Consejo de Conmebol realizada en Punta del Este reparó en la postulación de Argentina, Uruguay y Paraguay para el Mundial de 2030.Fernando Marín, que actúa como CEO de la candidatura, relató que la confederación «apoyó en forma unánime la iniciativa. Durante el Mundial de Rusia se aprovechará para promocionar tanto a los otros países como a la prensa las oportunidades que tiene este torneo. Sobre todo, por la tradición de los países que lo organizarían».
Así, en la Casa Conmebol que estará emplazada en la Plaza Roja de Moscú habrá un espacio destinado a detallar las potencialidades de un Mundial realizado por los tres países sudamericanos, justo en el centenario de la primera competencia ecuménica. Marín también adelantó que pedirán a la FIFA «el adelantamiento de la fecha de adjudicación, ya que como compiten 48 equipos hay que determinar una sede principal entre los tres países y resolver con antelación múltiples cuestiones de logística». La costumbre de la FIFA es definir las sedes de los mundiales con ocho años de anticipación, por lo que la del 2030 debería oficializarse en 2022. Esa fecha, según Marín, podría adelantarse «a 2020».
De todo el proceso previo a la adjudicación se encargará una organización sin fines de lucro llamada «Iniciativa 2030», presidida por Alberto García Carmona (abogado, ex General) que procurará apoyar la candidatura de los tres países. Según explica en su página web, la organización «realizará aportes para la organización del evento deportivo contribuyendo a la planificación y desarrollo de todas las actividades conducentes al éxito del mismo». Es decir que la mayoría de las tareas previas a la adjudicación de la sede serán financiadas por el sector privado (en la comisión directiva de Iniciativa 2030 también está Matías Patanian, de Aeropuertos Argentina 2000 y ex vicepresidente de River). En Iniciativa 2030 participan doce empresas de los tres países interesados en hospedar la competencia.
Según adelantó Marín, tanto Argentina como Paraguay y Uruguay piensan en la cantidad de estadios que aportaría cada país a la competencia (8 argentinos, 2 uruguayos y 2 paraguayos). «La idea es modernizar los recintos argentinos. Darles mayor infraestructura. Y también pensar en lo que suceda después del Mundial, para que queden a disposición de la comunidad y no se transformen en elefantes blancos como en otros países», apuntó Marín.
Las reuniones de trabajo de los tres países continuarán en las próximas semanas. Hay un acuerdo entre los postulantes para intentar comenzara a promocionarse durante los partidos que los seleccionados de estos tres países jueguen durante la fecha FIFA de marzo, que será la última antes del Mundial. Con el nuevo estatuto de la FIFA, las sedes de los Mundiales ahora se eligen mediante el voto de todos los integrantes del Congreso (216), y ya no es potestad del Comité Ejecutivo (hoy llamado Consejo), un órgano mucho más exclusivo y en el que no están representados todos los países.