SINGAPUR – Elina Svitolina silenció su parte de los escépticos esta semana después de ganar las Finales de la WTA BNP Singapur presentadas por SC Global, cerrando la puerta a una temporada difícil que le da una perspectiva renovada hacia 2019.
«Creo que ya no tengo nada que demostrarle a nadie», dijo después de superar a Sloane Stephens para ganar el título más grande de su carrera. «Definitivamente es una buena afirmación para mí y un buen impulso de… No puedo decir confianza, porque siempre trato de tener confianza en mí misma, es mi personalidad».
«Creo que para mí es solo que el tercer set realmente demostró que era mentalmente fuerte». “Eso es lo que hizo la diferencia».
Esa fortaleza de acero llegó después de un tramo de seis meses que casi hizo que se perdiera una segunda participación consecutiva en las Finales de la WTA, y tuvo derrotas en las primeras rondas en Dongfeng Motor Wuhan Open y el China Open hace solo dos semanas.
«Estaba claro con lo que tenía que hacer en la pista. He estado trabajando muy, muy duro. Aunque mis resultados no fueron buenos, desde Wimbledon, tuve cuatro o cinco semanas en las que estuve en la pista y trabajando en el gimnasio.
«Estos últimos cinco meses, hubo mucho trabajo que estaba realizando. Por eso, para mí fue un poco decepcionante, y estaba tratando de ser muy positiva, porque estaba dando todo en la pista de entreno, y los resultados no fueron los que esperaba. Por eso estaba un poco triste».
Svitolina, de 24 años, canalizó esa decepción en logro tras logro en Singapur, terminando una racha de siete derrotas consecutivas ante Petra Kvitova, vengando una derrota ante Caroline Wozniacki y ganando dos sets más de tres sets sobre Kiki Bertens y Stephens para capturar el título.
«Me mantuve muy positiva, y creo que eso fue lo que hizo la diferencia en esta semana. Pude jugar bien y competir».
Su pretemporada estará muy ocupada, abordará los problemas de salud y redirigiendo a su equipo, debatiendo si debe contratar un entrenador a tiempo completo además del actual capitán Andrew Bettles.
«Voy a hablar con Andy y ver las mejores opciones, qué entrenadores están disponibles en este momento para tratar de trabajar, ya sabes, por algún tiempo». Es un poco más fácil trabajar durante la pretemporada, porque no estás bajo una presión loca. No es lo mismo que empezar, por ejemplo, ya sabes, en la mitad de la temporada.
“Tengo que pensar realmente: no quiero tener, como, solo una persona y luego, ya sabes, acabar en dos semanas. Así que es una gran decisión».
Mientras tanto, la joven ucraniana reflexionará sobre las palabras intercambiadas con la Embajadora de las Leyendas de la WTA, Billie Jean King, por quien se nombró el trofeo de individuales de las Finales de la WTA.
«Es un secreto», bromeó ella. «Ella me felicitó. Eso es lo más importante. Fue un momento muy especial recibir el trofeo por ella, su trofeo”.
wtatennis.com