Desde este año, la administración del alcalde Maurice Armitage, a través del Dagma, se vinculó a la Mesa Nacional de Trabajo de la Pava Caucana o Penelope perspicax, por su nombre científico. De esta Mesa, liderada por la Asociación para el Estudio y Conservación de las Aves en Colombia – Calidris y la Wildlife Conservation Society – WCS Colombia, hacen parte organizaciones públicas y privadas, y tiene como objetivo promover, implementar y hacer seguimiento a estrategias que contribuyan a la conservación de esta especie, como el Plan de Conservación de la Pava Caucana.
Otras de las organizaciones que hacen parte de esta Mesa Nacional son la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC), WCS Colombia, el Parque Nacional Natural Farallones de Cali, el Santuario de Fauna y Flora Otún Quimbaya, la Fundación Zoológico de Cali, y las territoriales Andes Occidentales y Pacífico, de Parques Nacionales Naturales.
“La creación de este espacio surgió de la iniciativa de los actores que participamos en la actualización del Plan, lo que demuestra el interés de quienes estamos involucrados en la preservación de la Pava Caucana. Esta Mesa es la primera conformada a nivel nacional que apunta a objetivos de conservación de una especie, así que será un proceso innovador que marcará la pauta para la conservación de otras especies amenazadas a futuro”, indica Eliana Fierro-Calderón, coordinadora de la Iniciativa Especies Focales de la Asociación Calidris.
Fotografía de Jerson Ferney Herrera
La Pava Caucana se encuentra restringida al piedemonte del valle del río Cauca, entre los departamentos del Valle del Cauca, Quindío y Risaralda, y está catalogada en la categoría de En Peligro, según información entregada por BirdLife International en 2016. Amenazas como la deforestación, la cacería y el turismo no regulado, han generado disminución de las poblaciones de la especie.
Los predios de conservación del Dagma, ubicados en los corregimientos de Los Andes y Villacarmelo, cuentan con poblaciones identificadas de esta especie, aunque poco estudiadas. Por su parte, en las caracterizaciones de aves llevadas a cabo en los predios La Yolanda y La Carolina, se registró la presencia de Pava Caucana, lo que evidencia el buen estado de conservación de estos territorios.
Catalina Silva, representante del Dagma en la Mesa, indica que “la participación del Dagma en este espacio nacional es un gran paso para nuestra vinculación como un actor importante en los procesos de preservación del municipio, siendo esta la primera experiencia en la conservación de una especie amenazada en todo el territorio colombiano de la cual hacemos parte. Esto implica no solo la participación en un espacio académico, sino, además, en la implementación de acciones en el territorio para la restauración de los ecosistemas donde habita esta especie endémica”.
Dentro de las estrategias de conservación que se desarrollan conjuntamente entre Dagma y Calidris están la implementación de monitoreos mensuales en los predios La Carolina, La Yolanda, Quebrada Honda y el Danubio; la implementación de corredores ambientales a través de procesos de restauración ecológica, y la divulgación de información sobre la importancia de la conservación de esta especie. A futuro, el Dagma, con el apoyo de Calidris, generará estrategias de monitoreo que permitirán conocer más sobre la biología de esta especie y construir propuestas de conservación entre las entidades y la comunidad.
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