La agricultura intensiva, la urbanización, las actividades silvícolas no sostenibles y los cambios en los ecosistemas de agua dulce figuran como las principales causas de la degradación de las especies en la Unión Europea (UE), donde sólo el 15 % de los hábitats se encuentra en buen estado.
Conservación de la naturaleza
Así queda reflejado en un informe publicado este martes por la Comisión Europea (CE) sobre el estado de conservación de la naturaleza en el territorio comunitario basado en un estudio más detallado de la Agencia Europea del Medioambiente.
El documento, que agrega datos desde 2013 a 2018 para evaluar la aplicación de las Directivas sobre protección de la naturaleza, subraya la necesidad de actuar para situar la biodiversidad de Europa en la senda de la recuperación en el horizonte 2030, conforme a lo previsto en la Estrategia de la UE sobre Biodiversidad.También señala la crisis climática, la contaminación del aire, el agua y el suelo, la sobreexplotación de los animales mediante actividades de aprovechamiento ilegal y la caza y la pesca insostenibles, como factores que contribuyen a la erosión de la biodiversidad.
En esta línea, la restauración de humedales puede contribuir a la lucha contra la emergencia climática y crear oportunidades de empleo en las zonas rurales y periféricas.
Especies en declive
Por su parte, en lo que respecta a las especies, siguen en declive las aves que tienen una estrecha relación con la agricultura, y los peces de agua dulce presentan la proporción más elevada (38 %) de mal estado de conservación, debido a los cambios en las masas y el caudal de las aguas y a las instalaciones hidroeléctricas.
El informe muestra también que las medidas de conservación específicas dan resultados, por ejemplo, en especies que han sido objeto de proyectos de conservación como el lince ibérico, el reno de bosque y la nutria.
La evaluación pone de manifiesto que, si bien muchas especies y hábitats protegidos están resistiendo a la presión a la que se hallan sometidos, la mayor parte de ellos se encuentra en un estado deficiente o malo en la UE, y algunos de ellos presentan una tendencia continua de deterioro.
“En la Unión, no menos del 81 % de los hábitats protegidos se encuentran en mal estado”, apuntó el comisario europeo de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, Virginijus Sinkevicius, quien añadió que es necesario “llevar urgentemente a la práctica los compromisos de la nueva Estrategia de la UE sobre a Biodiversidad para invertir este declive en interés de la naturaleza, las personas, el clima y la economía”, señaló.
Por su parte, el director ejecutivo de la Agencia Europea de Medio Ambiente, Hans Bruyninckx, añadió que “se requieren cambios fundamentales en nuestra manera de producir y consumir alimentos, gestionar y utilizar los bosques y construir ciudades”, y que “estos esfuerzos deben ir acompañados de una mejor aplicación y un mayor control del cumplimiento de las políticas de conservación”, concluyó.
El próximo viernes, el tema de la biodiversidad será uno de los puntos de la agenda del consejo de Medioambiente que celebrarán los ministros europeos del ramo. EFEverde