Una sólida actuación a domicilio nos aseguró que volviéramos a tomar una ventaja saludable en la N17 después de una victoria por 4-1 contra el Wolfsberger AC en el partido de ida de nuestra eliminatoria de dieciseisavos de final de la Europa League el jueves por la noche.
El partido fue nuestro primer encuentro competitivo que se jugó en Hungría, y el juego cambió de Wolfsberg al Puskas Arena en Budapest debido a las restricciones de viaje del Reino Unido a Austria como resultado del COVID-19.
Los goles en la primera parte de Heung-Min Son, Gareth Bale y Lucas Moura nos pusieron en control en el descanso antes de que Michael Liendl marcara un penalti para los ‘locales’, pero recuperamos nuestra ventaja de tres goles cuando el suplente Carlos Vinicius agregó un cuarto en el minuto 87.
Fue una excelente exhibición en la primera mitad, ya que casi terminamos el juego antes del descanso. El primer gol llegó con 13 minutos en el reloj cuando un centro desde la derecha de Bale fue recibido por un cabezazo agachado y desviado de Son, que superó a Alexander Kofler en la portería de Wolfsberger.
Bale luego duplicó nuestra ventaja en el minuto 28, aferrándose al pase de Matt Doherty por el canal interior derecho, cortando su pie izquierdo favorito para vencer a Jonathan Scherzer antes de disparar a home.
Wolfsberger siempre fue una amenaza y se acercó poco después, pero Hugo Lloris dirigió de manera excelente el cabezazo de Dario Vizinger al larguero y lo aprovechamos al agregar un tercero 11 minutos antes del descanso. Fue todo el trabajo de Lucas, quien recogió el balón por la izquierda y se fue en una carrera laberíntica pasando a cuatro defensas antes de vencer a Kofler con un remate sereno.
Los austriacos se dieron un pie en el juego desde el punto de penalti a los 55 minutos después de que Moussa Sissoko derribara a Christopher Wernitznig y Liendl convirtió con frialdad desde 12 metros. Y casi suman un segundo cuando el recorte de Liendl encontró a Wernitznig, cuyo disparo desde el interior del área se estrelló contra el travesaño y rebotó en la línea de gol antes de que Lloris se acercara.
Fue de punta a punta en esa etapa y necesitábamos mantenernos decididos para negarle a WAC otro gol, mientras siempre lucíamos peligrosos y un merecido cuarto llegó a tres minutos del final. Erik Lamela cabeceó un centro de Pierre-Emile Hojbjerg y Vinicius sacó una pierna para desviar el balón y ponernos en control de la eliminatoria de cara al partido de vuelta del próximo miércoles en el norte de Londres.
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