Especialistas del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos efectuarán una visita técnica a una zona del río Coca, en el noreste de Ecuador, donde se presenta un proceso de erosión regresiva en un río, que amenaza a infraestructura petrolera y a una planta hidroeléctrica.
Erosión del río Coca
La misión de expertos estadounidenses permanecerá en el país hasta mañana viernes, informó el Ministerio de Energía en un comunicado.
El ministro ecuatoriano de Energía, Juan Carlos Bermeo, se reunió con los especialistas que tienen previsto visitar la zona del río Coca, entre las provincias amazónicas de Napo y Sucumbíos, donde se ha generado el proceso erosivo.
Bermeo, en declaraciones reproducidas por su despacho, destacó la importancia de la cooperación internacional para buscar las mejores opciones para hacer frente al fenómeno natural y proteger la infraestructura energética ubicada en la zona.El proceso de erosión regresiva ha generado múltiples deslizamientos de tierra y otros fenómenos en la zona de San Rafael, donde incluso una cascada, considerada como la más grande del país, desapareció de manera súbita por un socavón.
Para Ecuador es “muy valioso contar con la presencia de esta misión especial de técnicos del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos, quienes, con su experiencia y conocimiento especializado, aportarán al país con nuevos criterios”, dijo el ministro.
Bermeo remarcó que este tipo de colaboración permitirá al país “analizar y tomar las decisiones más oportunas respecto a la situación del río Coca, bajo parámetros operativos y técnicos”.
Amenazas para una hidroeléctrica y oleoductos
En esa zona, la Corporación Eléctrica de Ecuador (Celec) construye obras emergentes para contener el fenómeno que eventualmente podría amenazar a la central hidroeléctrica Coca-Codo-Sin Claire, así como a dos oleoductos petroleros.
Los técnicos estadounidenses prevén revisar los estudios implementados hasta el momento, entre ellos los modelos geológico, hidráulico, los análisis fluvio-morfológicos, de topografía y los modelos digitales del río Coca, indicó el Ministerio.
A través de esta visita, se busca “fortalecer la colaboración científica entre ambos países y recopilar los aportes técnicos para tomar decisiones que permitan mitigar la erosión regresiva del río Coca”, añadió la fuente.
El 7 de abril del año 2020, el Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE, estatal), el de Crudos Pesados (OCP, de gestión privada) y un poliducto para transporte de gasolinas suspendieron sus actividades por el fenómeno erosivo en el sector de San Rafael, que provocó la rotura de las tres tuberías.
Petroecuador y OCP debieron construir unas variantes al recorrido de sus ductos, ante el proceso de “erosión regresiva” que ha afectado otros sitios vecinos como la cascada San Rafael.
El SOTE tiene unos 500 kilómetros de longitud, corre paralelo al OCP y une los campos de extracción de crudo de la región Amazónica (noreste) con los puertos de embarque en la provincia costera de Esmeraldas (noroeste).
Ecuador, que produce unos 530.000 barriles de petróleo diarios, basa su economía en la exportación de crudo, una de las principales fuentes de ingreso de divisas para una economía que está completamente dolarizada desde el año 2000. EFEverde