El plan de la NASA para retirar la Estación Espacial Internacional implica estrellarla contra el Océano Pacífico y dejarla olvidada en las profundidades.
La Estación Espacial Internacional (EEI) es un laboratorio único en muchos sentidos. No sólo porque se trata de una estancia fuera del planeta que ha estado permanentemente habitada desde hace 21 años y es un laboratorio espacial sin precedentes, sino porque representa el primer y único esfuerzo de cooperación internacional en pro de la humanidad. No obstante, la Estación Espacial Internacional está próxima a cumplir su ciclo y la NASA ha anunciado que planea retirarla haciéndola estrellarse en el Océano Pacífico.https://988731b57083fc74acae41fbc66cb967.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-38/html/container.html
Rusia se retira y deja incertidumbre
Hace unos meses Roscosmos, la agencia espacial rusa, anunció su retirada del proyecto de cooperación internacional. Dejo claro que desocuparía sus módulos de operación de la Estación Espacial Internacional para el 2025. También declaró sus intenciones de poner en órbita su propia estación espacial.
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Con el anuncio la comunidad astronómica internacional se cimbró, pues la decisión no sólo tiene implicaciones meramente científicas sino también geopolíticas. En primera instancia deja sobreentendido el término de la cooperación internacional. Además, abre la posibilidad de reavivar la carrera espacial entre las potencias del mundo. Y finalmente, termina de abrirle las puertas a la industria privada.
Estación Espacial Internacional directo al fondo del Pacífico
En un comunicado emitido por la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), dejó claras sus intenciones de continuar operando la Estación Espacial Internacional hasta el 2030, pese a la ausencia de Roscosmos. Dijo que la EEI “está entrando en su tercera y más productiva década como una plataforma científica innovadora en microgravedad”. También aclaró que esperan “maximizar estos retornos de la estación espacial hasta 2030 mientras planificamos la transición a los destinos espaciales comerciales que seguirán”.
Pero una vez que el ciclo de vida del megaproyecto internacional culmine en 2031, se deben tomar acciones para sustraerla de órbita. El plan de la NASA para retirar la Estación Espacial Internacional, implica un descenso controlado hacia la Tierra para luego estrellarla directamente contra el Océano Pacífico.https://988731b57083fc74acae41fbc66cb967.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-38/html/container.html
Se tiene planeado que la EEI entre directamente hacia el fondo del océano en una región conocida como Punto Nemo. El nombre oficial de la región es Área Deshabitada Océanica del Pacífico Sur, pues es la región de la Tierra más remota. Se encuentra a casi 5 mil kilómetros de la costa este de Nueva Zelanda. Y a más de 3 mil kilómetros al norte de la Antártida.
Controversia ambiental
Aunque se ha descrito al Punto Nemo como la región menos biológicamente activa, en realidad no se sabe si el fondo realmente es inhóspito. Con anterioridad se creía que lugares como la Antártida o Dallol ‘el infierno en la Tierra’, estaban completamente libres de vida por sus condiciones extremas. No obstante se ha encontrado que en realidad la vida sí puede surgir ahí contra todo pronóstico.https://988731b57083fc74acae41fbc66cb967.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-38/html/container.html
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El Punto Nemo es actualmente un cementerio espacial, diversas naves ya se han dirigido hacia sus profundidades. La basura espacial es un problema creciente pues es tan relativamente reciente que no se conocen los alcances que implica hundir los escombros de chatarra en el fondo del océano. Pero ya fuese que genere o no desequilibrio en el región natural, lo cierto es que aún así queda el dilema bioético detrás del cementerio espacial en el fondo del océano.
ecoosfera.com