El neerlandés Fabio Jakobsen (Quick-Step Alpha Vinyl) confirmó su estatus de velocista más efectivo del mundo anotando su primera victoria de etapa de siempre en el Tour de Francia resolviendo en su favor la llegada masiva que definió la segunda etapa de la edición 2022 de la Grande Boucle.
El belga Wout van Aert (Jumbo-Visma) concluyó en segunda posición, rebosante de fuerza, para arrebatar por un solo segundo el maillot amarillo de líder a Yves Lampaert, coequipier de Jakobsen y ganador de la crono inicial de Copenhague. Tercero en meta fue el local Mads Pedersen (Trek-Segafredo). El periplo de la gran ronda francesa en Dinamarca concluirá este domingo con una nueva etapa en línea entre Velje y Sonderborg, de perfil llano.
176 corredores tomaron la salida en la segunda etapa del Tour de Francia 2022, que cubriría 202,2 kilómetros entre Roskilde y Nyborg, a las 12:39. Nada más darse el banderazo de salida, con una ligera dilación debido a una serie de problemas mecánicos durante el recorrido neutralizado, el danés Magnus Cort (EF Education-EasyPost) abrió las hostilidades. Le secundaron el noruego Sven Eryk Bystrom (Intermarché-Wanty Gobert) y los franceses Cyril Barthe y Pierre Rolland (B&B Hotels-KTM). El cuarteto rodó en armonía hasta llegar a la primera subida puntuable de esta Grande Boucle, la Côte d’Asnaes Indelukke (4ª, km 62). En ella, Rolland y Barthe trataron de sorprender a sus compañeros de aventura. Sin embargo, Cort y Bystrom acabaron por mostrarse más fuertes y dejarles atrás. El ciclista de EF Education-EasyPost sería el primero en transitar por la cima de un repecho en el que ya había ganado una etapa de la Vuelta a Dinamarca nueve años atrás.
Liderato de la Montaña para Magnus Cort
Cort también se impuso sin dificultades a Bystrom en la Côte d’Hove Straede (4ª, km 72,5) y la Côte de Karup Strandbakke (4ª, km 84) para confirmarse como primer líder de la clasificación de la Montaña. El danés incluso alzó los brazos al coronar esta última subida, exultante. El pelotón transitó por la cima a 3’15” de cabeza de carrera, a la postre ventaja máxima de la fuga sobre el grupo principal. Mientras tanto, Barthe y Rolland cesaron su esfuerzo y acabaron por ser absorbidos por el pelotón en el kilómetro 97. A Bystrom le correspondería pasar primero por Kalundborg (SI, km 126,9), con el grupo principal a 45” encabezado por Caleb Ewan (Lotto-Soudal).
Caídas sin consecuencias en los guarismos
Restaban 61 kilómetros para meta cuando Bystrom aceleró para dejar atrás a Cort. La cabalgada en solitario del noruego se extendería exactamente 30 kilómetros más, lo cual le granjeó el premio de la Combatividad, antes de ser aplacada por un pelotón nervioso por la proximidad del Puente de Gran Belt, gran aliciente de la etapa por cuando el azote del viento presagiaba posibles cortes. La tensión provocó una caída que cortó a Rigoberto Urán (EF Education-EasyPost) justo antes del puente, así como un afilador nada más entrar en él que mandó al suelo a una decena de ciclistas entre los que destacaba el portador del maillot amarillo, Yves Lampaert (Quick-Step Alpha Vinyl). El belga retomó la marcha rápidamente, lo cual le permitió gozar del rebufo de los coches de equipo para regresar al seno de un grupo principal renuente pero compacto dado el viento de cara. En cuanto al colombiano, una agónica caza le devolvió al par del pelotón a 8,5 kilómetros de meta. El pelotón vivió un último sobresalto con una montonera dentro de los últimos tres kilómetros que no afectará a los guarismos de la clasificación general… pero sí a los cuerpos de los implicados.
FABIO JAKOBSEN: “ME SIENTO AFORTUNADO DE PODER COMPETIR”
La etapa de hoy ha sido ‘incroyable’. Ha sido un camino largo [desde mi caída en la Vuelta a Polonia 2020], paso a paso, acompañado por mi familia, mis amigos, los técnicos de mi equipo… un montón de grandes personas que hoy pueden ver que todo esto ha merecido la pena. Todavía tengo que lidiar con las consecuencias de aquella caída. Me debo acostumbrar, porque nunca van a desaparecer del todo. Me siento afortunado de poder seguir disfrutando de competir… y de ganar una etapa en el Tour de Francia.
Mi equipo, Quick-Step Alpha Vinyl, me mantuvo bien colocado durante todo el puente y hasta que salimos de él. [Michael] Morkov me dejó en la rueda de Van Aert. En el último kilómetro pugné con Peter Sagan; nos tocamos, pero por suerte no nos caímos. En la recta final, de 150 metros, pude acelerar y rebasar a mis rivales para ganar. Contándolo así suena fácil, pero te aseguro que las piernas me dolían un montón. Llevaba 15 años soñando con ganar una etapa en el Tour de Francia. Es el triunfo que quiere conseguir todo sprinter. Muchas gracias a todo el público danés por su cariño; espero que pueda disfrutar mucho con nosotros.
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