Solo podía terminar así, este 2022. Con victoria, pero con el corazón en la garganta, hasta el minuto 96, merecido pero sufrido: Inter venció 3-2 a Atalanta en Bérgamo, el equipo de casa en la tabla de posiciones se desliga y sube a 30 puntos después de quince días. Una victoria que trae, bien impresionada, la firma de Edin Dzeko: implacable en el área, Edin en su presencia 250 en la Serie A logra el doblete que da la vuelta al Atalanta, en un partido caracterizado por desvíos de todo tipo, con Palomino protagonista en la buena. y mala y fundamental Onana en la custodia de la portería nerazzurra.

Justo Palomino, reincorporado esta semana, prácticamente entra en carrera tras la lesión de Toloi en el calentamiento. Se convertirá en uno de los factores de un partido que el Atalanta encara como siempre: hombre a hombre, transversal, bloqueando cualquier posibilidad de iniciativa del Inter y presionando muy alto. Y así anestesia al Inter, al menos en la primera media hora, cuando Onana es el superhombre que mantiene la portería a cero. Primero sobre Koopmeiners y luego sobre Palomino André inventa dos superparadas. No puede hacer nada a los 25′ de penalti de Lookman, concedido por falta de De Vrij sobre Zapata.

La reacción del Inter no se hizo esperar. Como gran equipo, los de Inzaghi cambian de rumbo y aplastan al Atalanta, que regresa de dos derrotas consecutivas y no muy sólido por detrás. Dimarco es una astilla por izquierda y saca balones en repetidas ocasiones, el equipo llena bien el área y al 36′ encuentra el gol del empate: balón cortado de Calhanoglu, remate de Lautaro y desvío volador por fuera de Dzeko, que bate a bocajarro a Musso. Un gol fundamental que da mucha fuerza a los nerazzurri.

La segunda mitad está llena de lágrimas: los de Dumfries abren la segunda parte, luego el Inter aumenta cada vez más el ritmo y aplasta al Atalanta. El gol está maduro, tras la oportunidad desde la frontal de Mkhitaryan aquí se materializa gracias a un balón de Dimarco desde la izquierda y un desvío de Dzeko de cara a la portería, pese al intento desesperado de Maehle. No paramos, Atalanta está contra las cuerdas y aún así va K.O. cuando Calhanoglu produce el córner habitual: Lautaro spizza, Palomino desvía en propia portería para el 1-3.

El Inter es brillante, ataca, intenta cerrar el partido. Entonces el Atalanta reacciona también gracias a los cambios, con Hojlund convirtiéndose en una importante referencia adelantada. Palomino se redime y al 77′ reabre el partido de cabeza, para un final candente. Luchamos mucho, hasta el 96′. Onana abraza el balón de Koopmeiners, Inter ve seguros los tres puntos. Los nerazzurri acaban en 2022 y acaban con victoria. Cita en enero, siempre Forza Inter.

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