Los movimientos del cosmos nos regalarán una serie de cinco superlunas nuevas seguidas que marcarán el final del 2022 y el comienzo del 2023. La primer superluna nueva ocurrirá el próximo 23 de noviembre y será sucedida por cuatro fenómenos astronómicos de la misma naturaleza, hasta marzo de 2023.
El astrofísico Fred Espenak es reconocido por haber pertenecido al Goddard Space Flight Center de la NASA. Ahora se dedica a la predicción de eclipses y fenómenos astronómicos como las superlunas. Según Espenak la bóveda celeste dará lugar a una serie de cinco superlunas nuevas que comienzan en noviembre.
Una luna nueva es aquella que pasa entre la Tierra y el Sol, y las superlunas son aquellas que se colocan en su punto más cercano a nuestro planeta. Quizá conozca mejor este último concepto gracias a las superlunas llenas que son plenilunios increíbles en donde la Luna se alza con su máximo esplendor en la bóveda celeste. Pero este tipo de fenómeno no sólo ocurren durante las lunas llenas, sino que también puede ocurrir durante la fase nueva.
5 superlunas nuevas
Los datos compartidos por Espenak nos dan fechas concretas con la distancia exacta a la que la Luna se colocará de la Tierra durante los novilunios o lunas nuevas:
La primera de las superlunas nuevas será el 23 de noviembre de 2022, cuando el satélite natural se posicione justamente entre nuestro planeta y el Sol a tan sólo 366 mil 161 kilómetros de nosotros. El siguiente mes, el 23 de diciembre de 2022, la superluna nueva estará todavía más cerca que la anterior a 359 mil 083 kilómetros. Con esta termina la serie del año, sin embargo, se extenderá hasta el próximo año.
Las superlunas nuevas de 2023 comenzarán el 21 de enero con una asombrosa distancia de 356 mil 571 kilómetros de la Tierra. Más tarde, el 20 de febrero habrá otro novilunio a una distancia de 359 mil 065 kilómetros. Finalmente la serie culminará el 21 de marzo cuando el satélite natural se cruce entre el Astro Mayor y nuestro planeta, a una distancia de 365 mil 979 kilómetros de la superficie terrestre.
Según la NASA, el término de ‘superluna’ fue acuñado por primera vez en 1979 por el astrobiólogo Richard Nolle, quien estipuló que para que se le considere de esta forma, la Luna debe estar al menos dentro del 90% del perigeo. Normalmente se les presta mucha más atención a las superlunas llenas, ya que son completamente visibles en la bóveda celeste. En cambio, las superlunas nuevas lamentablemente no se pueden observar, ya que ocurren en el momento en que la cara nocturna de la Tierra está diametralmente opuesta a la ubicación de la Luna, pero son fenómenos igual de asombrosos.
ecoosfera.com