Bruselas, 24 ene (EFE).- La Comisión Europea presentó este martes una serie de recomendaciones a los países de la Unión Europea para frenar en 2030 el declive de los insectos polinizadores ante el descenso de las poblaciones de abejas, mariposas o avispas, que supone una amenaza para la biodiversidad y la agricultura en la UE.
«Las pequeñas cosas pueden operar grandes cambios en el mundo. En el caso de los polinizadores, estos pequeños insectos pueden definir el futuro de la naturaleza y la seguridad alimentaria a largo plazo», declaró en rueda de prensa el comisario europeo de Medioambiente, Virginijus Sinkevicius.
El Ejecutivo comunitario ha trasladado a los Estados miembros de la UE un documento con una serie de recomendaciones para «mejorar la conservación y aplacar las causas del declive» que refuerza una primera comunicación emitida en mayo de 2021, después de que el Tribunal de Cuentas de la UE subrayara en 2020 que las acciones comunitarias para proteger a estos insectos habían resultado ineficaces.
Declive de los insectos polinizadores
En concreto, Bruselas propone varias líneas de acción centradas en los polinizadores silvestres, y en especial en las 2.000 especies de abejas censadas en la UE. Estas pasan por conservar mejor a las especies y sus hábitats, restaurar sus entornos de vida en los paisajes agrícolas o mitigar el impacto del uso de pesticidas.
«La mitad de los cultivos de la UE que dependen de los polinizadores sufre un déficit. Reducir y reemplazar los pesticidas químicos es absolutamente necesario», señaló el vicepresidente de la Comisión Europea para el Pacto Verde, Frans Timmermans.
La Comisión Europea, que asegura que la UE ya tiene «uno de los sistemas de regulación más estrictos del mundo relativo a la aprobación de pesticidas», estima que la aportación de los polinizadores a la reproducción de cultivos y plantas silvestres tiene un impacto de «al menos 5.000 millones de euros al año» en el sector agrícola comunitario, por lo que su declive supone «un riesgo directo para la productividad agrícola», señaló en un comunicado el comisario de Agricultura, Janusz Woijciechowski.
«Donde se detecten impactos dañinos para los polinizadores, se tomarán medidas legales para restringir o prohibir el uso de los pesticidas concernidos», asegura el Ejecutivo comunitario.
Bruselas, que ya aborda el problema a través de distintas herramientas, algunas ya en uso como las Directivas de Hábitats y Pájaros, la Política Agrícola Común (PAC) o las políticas de cohesión, investigación e innovación, quiere reforzar ese trabajo.
La Comisión anima a los Veintisiete a que mejoren los hábitats de los polinizadores en áreas urbanas y a que les guarezcan de amenazas como el cambio climático, las especies invasoras o la polución lumínica.
Bruselas también pide a las capitales que trabajen para aumentar la concienciación pública y se propone además mejorar el conocimiento sobre los problemas que generan el declive de esos insectos, como la creación para 2025 de un mapa de áreas de polinización en la UE.
La Comisión Europea avanzó que más adelante presentará otro paquete de recomendaciones sobre polinización específicamente dirigidas a la agricultura, atendiendo a la iniciativa ciudadana «Salvar a las abejas y los granjeros». EFEverde