¿Alguna vez has pensado en qué huella quieres dejar en el mundo? La realidad es que hay muchas formas de dejar huella en el planeta o la sociedad. Einstein, por ejemplo, dejó como legado la teoría de la relatividad, Frida Kahlo su pintura y alguien como Nietzsche o Platón heredaron sus más profundos pensamientos.
Miles son las maneras en que podemos dejar una huella, sin embargo pocos piensan en la huella de carbono. Cada ser en el mundo, desde su nacimiento hasta su muerte, produce una huella de carbono, incluso Einstein, ¿pero cómo la producimos y a qué se refiere?
El nacimiento de la huella de carbono
En esencia la huella de carbono se refiere a las emisiones generadas por cada persona en el planeta, tanto las emisiones directas como indirectas de compuestos como el metano, el óxido de nitrógeno, los hidrofluorocarburos, los perfluororcarburos, el hexafluoruro de azufre y, principalmente, el dióxido de carbono (CO2). Esta medición se relaciona directamente con la estabilidad del ambiente y se popularizó en los años 2000.
Su origen se remonta a la necesidad de crear conciencia sobre el impacto de los actos individuales en la crisis ambiental, tales como desplazarse, alimentarse, consumir productos, utilizar recursos, etc.
De acuerdo con la ONG ambiental The Nature Conservancy se estima que cada habitante del planeta genera una media de casi cuatro toneladas anuales de CO2, mientras que en países como Estados Unidos esa cantidad se cuadruplica por persona y año.
El objetivo de su medición es considerar que no solo las grandes industrias generan un fuerte impacto al planeta, sino que las decisiones de cada persona como consumidor y habitante también determinan el equilibrio de nuestro entorno.
Por esta razón, BBVA desarrolló la calculadora de huella de carbono que puedes consultar en su aplicación. Esta nueva funcionalidad permite que los usuarios logren medir el impacto de algunas de las actividades básicas que realizan a través de BBVA, por ejemplo, el pago de luz, gas y gasolina (y todo desde la comodidad de su celular).
Contar con herramientas que nos permitan descubrir el impacto de nuestras acciones es uno de los primeros pasos para hacer un cambio y mitigar la huella de carbono sí está en tus manos, con la app BBVA puedes hacer más de lo que crees. Pero, si aún no estás tan seguro de qué actividades son las que se relacionan con las emisiones de CO2, aquí te presentamos algunas…
10 acciones en las que tu vida se conecta con la huella de carbono:
- El uso de automóvil en lugar de bicicleta o caminar
- Secar la ropa en secadora en lugar de utilizar un tendedero y dejarlas al aire libre
- Dejando cargadores y aparatos conectados a la luz
- El café de todos los días que compras en vaso de un solo uso
- Comida para llevar o comida en empaques de un solo uso
- Bolsas de plástico para el supermercado en lugar de bolsas de tela
- Comprando ropa que no necesitas solo por moda
- Consumiendo productos de industrias muy contaminantes
- Generando un exceso de desperdicio (alimentos u otros materiales)
- Desconociendo el impacto de tu consumo
Sin duda alguna muchas de las actividades diarias de una persona contribuyen directamente a aumentar la huella de carbono. Identificar esas acciones puede ayudar a disminuir el impacto, pero si aún no estás completamente seguro de cuánto de tu rutina afecta al ambiente, entonces entra a BBVA para medir su impacto y empezar a marcar la diferencia.
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