Una calavera apareció en el paisaje de la Antártida y es la muestra de la triste realidad que enfrenta la región más gélida del mundo.
La pareidolia hace su magia cuando se trata de encontrar patrones en formas que no reconocemos, pero cuando se trata de una isla remota en la Península Antártica las cosas se ponen preocupantes. De manera hilarante, una calavera anuncia el derretimiento de la Antártida, una muestra más del cambio que está ocurriendo en todo el planeta.
Por mera supervivencia o por engaño de la vista, la pareidolia está presente en la mente humana. Quizá para reconocer rostros en la oscuridad de la noche en medio de la selva o para algún otro fin, el caso es que hemos desarrollado la capacidad de encontrar rostros en figuras difusas. Pruebe con sombras y luces y verá que de inmediato encontrará rostros que lo miran directamente.
El anuncio de deshielos en la Antártida
Así fue como los observadores de una imagen satelital encontraron una calavera que evidencia el derretimiento de la Antártida. La Isla Vega es el pedazo de tierra que puede ver en las imágenes, misma que se encuentra en la Península Antártica y que fue formada por una serie de erupciones volcánicas. La isla remota es la más septentrional del grupo de islas conocidas como James Ross, con una extensión de apenas 27 kilómetros de largo y casi de 10 de ancho.
Es un escenario de polaridades, pues la roca volcánica de Vega hace que su superficie sea oscura, pero al encontrarse muy hacia el polo sur, está cubierta por hielo prístino que hace contraste con el fondo oscuro. En tiempos antiguos el suelo no era visible, sin embargo, la elevación de temperaturas como consecuencia del cambio climático, está derritiendo las capas de hielo y ha hecho que el contorno del suelo oscurecido quede al descubierto.
Tal como si se tratara del contorno de un dibujo, el derretimiento de la nieve y el hielo ha formado una pareidolia que se observa al centro y en la parte superior de la isla. Una enorme calavera parece posar de costado y sonríe hacia la derecha. Aunque la vista nos engaña, en realidad el ‘enorme ojo’ de la calavera es un nunatak, un pico montañoso que sobresale del glaciar Bahía del Diablo. Los nunatak suelen ser picos montañosos que se encuentran aislados y que están ampliamente rodeado por un campo de hielo, es por eso que desde las alturas se mira como si se tratara de un gran ojo.
Un verano austral muy cálido
En febrero pasado, justo al final del verano austral que registró temperaturas inusualmente cálidas, las imágenes satelitales revelaron que el extremo este de la isla estaba libre de nieve y hielo; además de que el área occidental había perdido casi las tres cuartas partes de su extensión de nieve. Esto sólo evidencia cómo la Península Antártica se está calentando más rápido que el promedio de la Tierra, de hecho, los registros muestran que el verano se extendió hasta 20 días adicionales más del promedio, causando deshielos adicionales.
Las estadísticas del último verano austral no son datos aislados, forman parte de una tendencia en los registros históricos que muestran una elevación de la temperatura promedio de la Antártida. Los termómetros de la Isla Vega se elevaron hasta más de los 12ºC, una temperatura muy alta tomando en cuenta que se trata de la región más gélida del planeta.
Al parecer la tendencia a la baja de hielo no cambiará a menos que se tomen medidas drásticas respecto a las emisiones de carbono, y aún así, hay expertos que aseguran que ya no hay marcha atrás para mantener al planeta tal como lo conocimos. Nos queda aportar nuestro granito de arena y valorar la belleza de la Madre Naturaleza.
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