Lo del derbi vasco no fue casualidad.
La Real Sociedad consigue su primera victoria en esta edición de la Champions tras vencer con facilidad al Red Bull Salzburgo como visitante. Los goles llegaron en dos grandes definiciones de Mikel Oyarzabal y de Brais Méndez, que regalaron a los de Imanol Alguacil sus primeros tres puntos en la competición para ocupar así el liderato de grupo a falta de que se dispute el otro encuentro del grupo entre el Inter de Milán y el Benfica en Italia. Aupados por su victoria incontestable en el derbi vasco y con este nuevo triunfo, la Real disfruta del mejor momento de la temporada.
Los momentos destacados
- Pocos inicios más fulgurantes que el de la Real Sociedad en Salzburgo. El conjunto de Imanol Alguacil salió con el cuchillo entre los dientes y rápidamente clavó la primera punzada Mikel Oyarzabal. El capitán parece ser nuevamente el jugador que conocíamos antes de la lesión. Venía con un gol bajo el brazo en el derbi vasco contra el Athletic Club y ahora también era el primero en abrir la lata en la segunda jornada de la Champions League frente al Red Bull Salzburgo. La parte interior de su pierna derecha dibujó sobre el verde un lanzamiento perfecto al palo largo de Alexander Schlager para romper el empate.
- Lo que vendría después de Brais Méndez ya es historia de este equipo en la Liga de Campeones. Un contragolpe perfecto orquestado por el gallego hacía sonar en Salzburgo el séptimo de caballería. Solamente a lomos de un caballo, el del exjugador del Celta. A base de quiebros, regates y una definición propia de los mejores, firmaba Brais uno de los goles de la jornada. El 2-0 daba tranquilidad a Alguacil y a los cientos de txuri urdin que se desplazaron hasta la ciudad austriaca, que disfrutaban de un auténtico recital desde las tribunas.
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Resumen final: Real Sociedad
La Real suma su cuarta victoria consecutiva, otro gran salto para un club al que hay que tener en cuenta. Una vez más, empezaron con fuerza, se pusieron por delante y controlaron la situación. Tuvieron menos el balón en la segunda parte, pero nunca hubo motivo real de preocupación en una gran actuación del equipo. Un partido impresionante.
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