EFEverde.- El ingeniero boliviano Carlos Tamayo ha centrado sus investigaciones en buscar una solución a los efectos del incremento del nivel del mar con una propuesta que lo hizo ganador de la competición Global Impact de la Universidad Singularity de Silicon Valley.
“Definitivamente hay un problema del incremento del nivel del mar que afecta visiblemente a ciudades como Miami Beach o Fort Lauderdale”, dijo Tamayo en entrevista con Efe, que quiso aclarar que hay “mucha información que se difunde y que no está bien fundamentada”, lo que provoca “miedo” entre la población.
Y es que el incremento del nivel del mar en el sur de Florida es uno de los temas que más preocupan a los habitantes de esta zona, un problema que se busca atacar desde diferentes frentes, uno de ellos, es desde el campo de la ingeniería.
En esta región del país, el suelo es de piedra caliza, lo cual provoca una porosidad que permite el paso hacia la superficie de las aguas subterráneas.
Las soluciones, según el ingeniero boliviano, pasan por la construcción de muros de contención, elevación de las playas y adaptación de los sistemas de drenaje.
La propuesta de Tamayo es una herramienta digital que permita hacer una evaluación por medio de un sistema de presas artificiales con barreras subterráneas para tratar los problemas del incremento del nivel del mar y la entrada de agua salina.
Su sistema, que para desarrollarlo busca apoyo económico en diferentes sectores, está destinado a proporcionar una protección eficaz contra inundaciones costeras y eliminar o minimizar los efectos del flujo de agua subterránea.
Desde 1870 el nivel del mar ha aumentado unas ocho pulgadas y según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OECD, por su sigla en inglés), Miami es la ciudad del mundo más vulnerable en términos de daños a la propiedad, con más de 416.000 millones de dólares, debido al aumento del nivel del mar.
En ciertas zonas costeras del sur de Florida el nivel del mar ha aumentado unos nueve pulgadas y se espera que en los próximos quince años las inundaciones se tripliquen.