Araçuaí, una pequeña ciudad de 34.297 habitantes en el interior del estado de Minas Gerais (sudeste), registró el domingo una temperatura récord de 44,8 grados Celsius, la mayor ya medida en un municipio en la historia de Brasil, informaron este lunes fuentes oficiales.

Tras una semana en que las principales ciudades de Brasil, como Sao Paulo y Río de Janeiro, renovaron sus récords de temperatura en el año, Araçauí superó el récord de mayor temperatura en el país que desde el 21 de noviembre de 2005 detentaba Bom Jesús, una ciudad en el estado de Piauí (noreste), con 44,7 grados Celsius.

De acuerdo con un mensaje publicado este lunes en sus redes sociales por el Instituto Nacional de Meteorología (Inmet), la temperatura medida el domingo en el pequeño municipio, ubicado en el Vale do Jequitinhonha, es la mayor de la serie histórica del organismo.

Más ciudades con récord de temperaturas

El domingo fue precisamente el décimo y último día de una ola de intenso calor que afectó todo el sureste de Brasil, que tan solo fue aliviado por las lluvias de los dos últimos días.

Brasil: calor, incendios e inundaciones

Climatología extrema en Brasil: el norte y el centro sufren una ola de calor y sequía sin precedentes para esta época del año, mientras el sur hace frente a lluvias torrenciales e inundaciones.

Agua contra el calor

En el centro del país las temperaturas también son elevadas. En Sao Paulo, un niño de dos años murió tras ser olvidado en una furgoneta escolar bajo el calor. El Instituto Nacional de Meteorología calificó de muy peligrosa la situación en 15 estados federales y el distrito que rodea la capital, Brasilia.

Imagen: Fabio Vieira/FotoRua/NurPhoto/picture alliance

Una niña salta junto a una fuente en una plaza de la ciudad de Sao Paulo, Brasil.

Fuego en el humedal

Enormes nubes de humo oscurecen el cielo en Porto Jofre: en el Pantanal, el mayor humedal del mundo, la sequía y el calor han provocado los peores incendios de los últimos 20 años. Los estados afectados de Mato Grosso y Mato Grosso do Sul declararon el estado de emergencia.

Imagen: ROGERIO FLORENTINO/AFP/Getty Images

En primer plano, barcos amarrados a orillas de un río. Al fondo, una enorme nube de humo se eleva hacia el cielo por encima de un bosque.

Registro sin precedentes

Los medios de comunicación brasileños informan de que sólo en noviembre se registraron más de 3.000 incendios. Se trata de un dato sin precedentes. Según los expertos, los incendios se deben sobre todo a la actividad humana, en particular al uso de técnicas de tala y quema en la agricultura. La sequía está empeorando aún más la situación.

Flora y fauna quemadas

Los incendios ya han afectado a 35.000 hectáreas del Pantanal, lo que equivale aproximadamente al tamaño del Reino Unido. En el Parque Nacional Encontro das Águas, los incendios amenazan el hábitat de una de las mayores poblaciones de jaguares del mundo. Los investigadores de la Universidad de Río de Janeiro calculan que ya se ha destruido el 34 por ciento del parque.

Imagen: Andre Penner/AP Photo/picture alliance

La vista aérea muestra un río que serpentea por el paisaje, con sus orillas bordeadas de vegetación. A su alrededor, se ven árboles carbonizados y tierra quemada.

La tierra bajo el agua

Mientras el centro y el norte de Brasil sufren el calor y la sequía, la población del sur del país tiene un problema opuesto: las inundaciones y corrimientos de tierra provocados por las fuertes lluvias se cobraron al menos seis vidas en los estados de Santa Catarina y Rio Grande do Sul, la semana pasada.

Imagen: DIEGO VARA/REUTERS

Cuatro personas a contraluz, una de ellas un niño, atraviesan una carretera inundada, con el agua hasta las rodillas. En el extremo derecho de la imagen, se ve un coche medio sumergido.

Lucha contra el barro

El desbordamiento del río Taquari inundó varias ciudades de Rio Grande do Sul. Entre ellas se encuentra Roca Sales, en la foto, donde decenas de voluntarios se esfuerzan por retirar de las calles el lodo y los escombros que dejó el paso del río.

En el citado período de diez días, otras tres ciudades registraron temperaturas hasta entonces récord para el año, de 43,4 grados centígrados: Corumbá el 14 de noviembre, São Romão el 15 de noviembre y Porto Murtinho el 16 de noviembre.

En Río de Janeiro los termómetros marcaron 42,6 grados Celsius el jueves, aunque la sensación térmica llegó a 53,5 grados centígrados en algunos barrios, el mayor registro del año.

Las últimas olas de calor en Brasil han sido atribuidas al fenómeno de El Niño, que redujo las precipitaciones principalmente en la Amazonía, y al calentamiento del océano Atlántico. Igualmente son atribuidas a un efecto de la crisis climática a nivel global provocados por el aumento de las emisiones de gases contaminantes.

jc (efe, Folha de S.Paulo)

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