Partidazo en Manchester, con el liderato de la Premier League en juego, que acabó en tablas. Separados por un solo punto en lo alto de la tabla, el City recibía al Liverpool y mandó en el partido y en el marcador durante buena parte de los minutos.
Erling Haaland abrió el marcador en la primera mitad. El equipo generó para llevarse los tres puntos, pero el segundo gol no llegó y los Reds igualaron a falta de diez minutos con un tanto de Trent Alexander-Arnold.
El City no pudo encadenar la victoria número 24 en el Etihad, pleno en año natural este 2023, pero sigue sin conocer la derrota en casa en prácticamente doce meses.
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Los de siempre, donde siempre. Los equipos que han marcado el último lustro en Inglaterra, de nuevo en lo más alto, en la pelea por el título. Un partido de alta intensidad de inicio y más contenido con el paso de los minutos, pero siempre con un City dominante.
Una victoria significaba el liderato. Lo contrario, cederlo ante el principal rival o uno de los muchos perseguidores en una comprimida zona alta de la Premier League. Una derrota, quizá un golpe más anímico que con efectos prácticos, tan solo disputadas trece fechas en el campeonato.
El Liverpool, el único conjunto capaz de romper la hegemonía del City en el fútbol inglés en los últimos seis años llegaba a Manchester con aires y ambiciones renovadas, con una plantilla en plena reconstrucción, después de conquistas todos los títulos posibles desde 2019.
Pep Guardiola y Jürgen Klopp protagonizaban un nuevo episodio de su duelo particular. Marcado por la igualdad: 28 enfrentamientos, 11 victorias para Pep, 12 para Klopp, desde que se encontraran por primera vez en la Bundesliga.
Y el partido en el Etihad finalizó en tablas. En unos primeros minutos de tanteo, de toma de posiciones, Foden remató a las manos de Alisson, después de forzar el error del meta brasileño en la salida del balón, y la respuesta Red fue un cabezazo de Darwin Núñez bien resuelto por Ederson.
Pasaron los minutos y el City se hizo con el partido ante un Liverpool deseoso de encontrar una de sus frenéticas y letales contras, tras unos 20 minutos muy intensos, de alto ritmo.
Precisamente en una imprecisión de Alisson fruto de la presión, el balón acabó en los pies de Nathan Aké que se aventuró en el eslálom entre los defensas y sirvió el balón entre los centrales para que Haaland abriera el marcador.
17 goles en todas las competiciones para el noruego esta temporada, nueve en los últimos seis partidos. 50 ya en la Premier League en poco más de un año y cuatro meses en el equipo.
El segundo pudo llegar tras el descanso en las botas de Julián Álvarez, que remató alto, y Rúben Dias, que lo hizo a la red en una jugada invalidada por falta de Manuel Akaji sobre el intento de Alisson de despejar el balón.
A falta de diez minutos, el Liverpool encontró el gol en una de sus escasas ocasiones en el segundo tiempo. En un rápida y característica transición de los de Klopp, el balón llegó a Alexander-Arnold que lanzó un disparo cruzado desde la frontal imposible para Ederson.
Pero tuvo el City el gol en la última acción del partido. Un córner peinado por Haaland acabó con el esférico paseándose por la portería Red y saliendo fuera rozando el poste.
HISTÓRICO HAALAND
El gol del Haaland que abrió el marcador contra el Liverpool convirtió al noruego en el jugador más rápido en anotar 50 goles en la historia de la Premier League.
Erling necesitó solo 48 partidos para alcanzar esta marca, lo que representa 17 partidos menos que Andy Cole en 1994.
