Barcelona.- Algunas de las medidas para gestionar mejor los bosques como la recuperación de pastos donde hay matorral o la introducción del cultivo de viña aumentarían hasta un 20% el caudal de los ríos, según un estudio del Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF).

Las conclusiones de este estudio forman parte de una guía, que tiene como objetivo ofrecer a los gestores del territorio y propietarios un conjunto de recomendaciones para conseguir un paisaje resistente al cambio climático.

En el marco del proyecto LIFE MIDMACC, en el estudio ha participado el Departamento de Acción Climática de la Generalitat de Cataluña, el Observatorio Pirenaico de Cambio Climático, el Instituto Pirenaico de Ecología (IPE-CSIC), la IRTA, la Universidad de Zaragoza, la Universidad de La Rioja, y la Universidad Autónoma de Barcelona.

Los resultados de la guía muestran que la aplicación de medidas de gestión adaptativa en el territorio haría aumentar en un 18% el caudal de los ríos.

En el contexto actual de cambio climático, se ha producido un descenso del 28 y el 49% en el caudal de las cabeceras del Segre y de la Muga, respectivamente.

Se trata de una guía que ha sido creada a partir de la recopilación de las experiencias implementadas y monitorizadas en tres zonas diferentes de la montaña mediana mediterránea (el Valle de Aísa en Aragón, el río Anyet en Cataluña y el río Leza en La Rioja).

Entre las medidas propuestas para llevar a cabo una gestión adaptativa se ha tenido en cuenta la gestión forestal para la prevención de incendios, la recuperación de pastos donde actualmente hay matorral, y medidas para la introducción del cultivo de viña a las zonas de montaña para promover un paisaje heterogéneo.

Además, la guía incluye recomendaciones para mejorar el contenido de materia orgánica en el suelo e incrementar la disponibilidad hídrica, así como la reducción del área quemada de estas zonas de montaña. EFEverde