Nueva York, 17 de julio de 2024. A medida que los cambios ambientales, tecnológicos y sociales se mezclan en detrimento de la salud humana y planetaria, el mundo debe mejorar en su capacidad de dar seguimiento y respuesta a una serie de desafíos emergentes, concluye un nuevo informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y el Consejo Internacional de Ciencias (ISC, por sus siglas en inglés).

El informe Navegando nuevos horizontes: un informe de previsión mundial sobre la salud planetaria y el bienestar humano presenta ocho cambios mundiales críticos que están acelerando la triple crisis planetaria del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y naturaleza, y la contaminación y los desechos.

Los cambios incluyen la degradación del mundo natural por parte de la humanidad, el rápido desarrollo de tecnologías como la IA, la competencia por los recursos naturales, el aumento de las desigualdades y la disminución de la confianza en las instituciones. Estos cambios están creando una policrisis en la que las crisis mundiales se amplifican, aceleran y sincronizan, con enormes consecuencias para el bienestar humano y planetario.

Las dieciocho señales de cambio que las acompañan, identificadas por cientos de personas expertas a nivel mundial a través de consultas regionales y con las partes interesadas, incluida la juventud, profundizan en las posibles perturbaciones, tanto positivas como negativas, para las que el mundo debe prepararse.

«Ahora que los impactos de las múltiples crisis se están intensificando, es el momento de tomar la delantera y protegernos de los desafíos que están surgiendo», declaró Inger Andersen, Directora Ejecutiva del PNUMA. «El acelerado ritmo de cambio, la incertidumbre y los avances tecnológicos que estamos observando, en un contexto de turbulencias geopolíticas, significa que cualquier país puede perder el rumbo con mayor facilidad y frecuencia».

«Mediante el seguimiento de las señales de cambio y el uso del enfoque de previsión descrito en este informe (incluida la búsqueda fuera del espacio medioambiental tradicional), el mundo puede evitar repetir los errores del pasado y centrarse en soluciones que puedan resistir las perturbaciones futuras».

Señales de cambio

Entre los principales cambios y señales de cambio señalados en el informe se incluyen:

Se prevé que la demanda de elementos críticos de tierras raras, minerales y metales para impulsar la transición al objetivo de cero emisiones netas se multiplique por cuatro de aquí a 2040, lo que aumentará las peticiones de extracción en aguas profundas e incluso en el espacio. Esto plantea amenazas potenciales para la naturaleza y la biodiversidad, ya que podría aumentar la contaminación y los desechos, y desencadenar más conflictos.

Al descongelarse el permafrost en un planeta cada vez más caluroso, es posible que se liberen organismos ancestrales que pueden ser patógenos, lo que tendría importantes consecuencias para el medio ambiente, los animales y los seres humanos. Este fenómeno ya ha provocado un brote de ántrax en Siberia.  

Aunque la inteligencia artificial (IA) y la transformación digital pueden aportar beneficios, existen repercusiones ambientales, como el aumento de la demanda de minerales críticos y elementos de tierras raras y de recursos hídricos para satisfacer la demanda de los centros de datos. El uso de la IA en sistemas de armamento y aplicaciones militares, y el desarrollo de la biología sintética, necesitan una revisión cuidadosa a través de una perspectiva ambiental.

Los conflictos armados y la violencia están aumentando y evolucionando. Estos conflictos provocan la degradación de los ecosistemas y la contaminación, lo que repercute en las poblaciones vulnerables.

Los desplazamientos forzados aumentan el impacto sobre la salud humana y el medio ambiente. En la actualidad, una de cada 69 personas se ve obligada a desplazarse, una cifra que prácticamente se ha duplicado con respecto a hace diez años. Los conflictos y el cambio climático son sus principales desencadenantes.

Adopción de un enfoque de previsión

Sin embargo, el informe concluye que el uso de herramientas de previsión puede ayudar al mundo a anticiparse y prepararse para los próximos desafíos emergentes y las futuras perturbaciones.

Peter Gluckman, Presidente del ISC, declaró: «El proceso de previsión proporciona un conjunto de herramientas útiles para salir del cortoplacismo y ayudar a identificar oportunidades y riesgos futuros, siempre que se haga de forma verdaderamente pluralista, trascendiendo los estrechos mandatos institucionales, los sectores y otras divisiones artificiales que limitan cómo abordamos los problemas y las soluciones».

En el informe se recomienda adoptar un nuevo contrato social en el que participen diversas partes interesadas, incluidos los Pueblos Indígenas; dar más voz a la juventud; y replantearse las medidas de progreso para ir más allá del PIB.

Los gobiernos y las sociedades también pueden introducir objetivos e indicadores a más corto plazo que les permitan ser más ágiles en la gobernanza. Introducir herramientas y acciones para reconfigurar los sistemas financieros y redirigir los flujos de capital -una señal positiva de cambio en el informe- podría ayudar a reducir las desigualdades, erradicar la pobreza extrema y hacer frente a las crisis ambientales.

Apoyar una gobernanza ágil y adaptable requeriría un mejor seguimiento y evaluación de las intervenciones. Esto incluye integrar y mejorar el seguimiento del cambio medioambiental y hacer más accesibles los datos y los conocimientos.

Así como los impactos de las múltiples crisis están amplificando los daños al medio ambiente y a la salud humana, las soluciones están a la vista y hay acciones en marcha que abordarían los cambios globales y las señales de cambio identificadas en el informe. El proceso de previsión puede ayudar a acelerar estas acciones de respuesta y a desencadenar muchas más.

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