Ante la situación, las comunidades indígenas esperan que el permiso ambiental de la principal empresa que explota las reservas de litio sea revocado
por Perla Vallejo
Salar de Atacama se hunde entre 1 y 2 centímetros al año, ¿cómo lo descubrieron? Utilizando datos satelitales, investigadores de la Universidad de Chile analizaron la subsidencia del terreno, al parecer la ciencia relaciona esta pérdida con la extracción de litio.
La extracción de litio perjudica inevitablemente el suelo y provoca la contaminación del aire, la infraestructura minera afecta a las redes de drenaje y a la geomorfología de la superficie.
El equipo de investigadores utilizó datos recopilados entre 2020 y 2023, provenientes de la constelación de satélites SAOCOM-1 de la Comisión Nacional de Estudios Espaciales (Argentina). Estos aparatos, ubicados la órbita baja de la Tierra, utilizan la técnica de interferometría de radar de apertura sintética (InSAR), esto descubrieron:
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¿Por qué se está hundiendo Salar de Atacama?
Si bien la situación de Salar de Atacama aún no tiene causas definitivas, la explotación minera del salar podría ser una de las razones de su hundimiento, esto se debe a que, la explotación de salmueras se realiza por bombeo, conduciendo los fluidos ricos en litio desde el subsuelo hasta la superficie, donde son depositados en enormes piscinas.
El litio se obtiene mediante evaporación, proceso en que el 90% del agua se pierde en la atmósfera. Este proceso de recuperación de litio, realizado a lo largo de los años, resulta a una significativa caída en los niveles de agua subterránea.
Por tanto, el hundimiento del terreno es una consecuencia de largo plazo de la pérdida de agua subterránea donde los acuíferos se compactan y pierden permeabilidad y porosidad, lo que termina hundiendo la superficie (esté fenómeno también ocurre en otras minerías de Ciudad de México, California, Italia e Irán).
Las sospechas llegaron a este punto, dado que el hundimiento se encuentra junto a pozos que han sufrido el mayor descenso en los niveles del acuífero. Además, un estudio de 2019, citado en este artículo, concluyó que los niveles de agua subterránea han caído más de 10 metros en los últimos 15 años. En otras palabras, la pérdida de agua es más rápida que la velocidad de recarga del acuífero.
Aunque el estudio y las muestras recabadas afirman que la zona aún no presenta un problema a gran escala, sí debe considerar medidas para evitar repercusiones de otras dimensiones sobre la zona. Incluso, desde noviembre del 2016, la Superintendencia de Medio Ambiente (organismo del Estado encargado de fiscalizar los permisos ambientales) pidió la revocación de los permisos mineros.
Misma organización que busca un cese ante el impacto que implica el litio pues la mayoría de la zona de Saltar si bien es desértica cuenta con lagunas (Soncor, Aguas de Quelana y Peine) hábitat de diversas aves acuáticas, entre ellas tres especies de flamencos: el andino, el Chileno y el James, así como el refugio de los tapetes microbianos, ecosistemas conformados por microalgas y bacterias que podrían explicar el origen de la vida en la tierra.
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