SEATTLE — Empapado de pies a cabeza en varias bebidas alcohólicas, Juan Soto entrecerró los ojos y festejó con una sonrisa de oreja a oreja, exhibiendo la camaradería que ha encontrado en los Yankees. El astro dominicano se puso el uniforme a rayas con la esperanza de guiar a la franquicia más ganadora de Grandes Ligas a la postemporada, y ahora ese momento ha llegado.
Los Yankees estarán listos para octubre, luego de asegurar su boleto con una victoria por 2-1 en 10 entradas sobre los Marineros la noche del miércoles en T-Mobile Park. El jubiloso jardinero bañó a sus compañeros con champan y cerveza, recibiendo el mismo trato de parte de sus compañeros, incluso hizo una pausa para bailar un poco cuando una popular canción comenzó a sonar en los altavoces.
“Creemos en nosotros”, exclamó Soto. “Eso es lo que me hace pensar que podemos ganarlo todo, porque creemos en nosotros. No tratamos de convertirnos en héroes sobre el terreno. Sólo tratamos de hacer nuestro trabajo y ganar juegos”.
La llegada de Soto representó un momento clave para este club de los Yankees, el cual brindó por su regreso a la postemporada tras un año de ausencia. Han pasado 15 años desde que los Bombarderos del Bronx jugaron en una Serie Mundial, y estos muchachos creen que el viaje apenas comienza.
Rizzo remolca a Domínguez con doblete
“Definitivamente sabemos que nos queda trabajo por hacer. Queremos la división”, declaró el capitán Aaron Judge. “Pero haber tenido la oportunidad de obtener nuestro boleto de regreso a la postemporada, tras un año de ausencia, significa mucho. Tenemos a un grupo bien especial aquí, y los muchachos están bien emocionados”.
Los Yankees cuentan con el mejor récord de la Liga Americana con 89-63, tienen 5.0 juegos de ventaja sobre los Orioles en el Este de la Liga Americana con 10 partidos por jugarse. Se trata de la ventaja más grande que han tenido esta campaña.
“Hemos pasado por muchas cosas este año”, manifestó el manager Aaron Boone. “Entendemos que este es sólo el primer paso, pero que es uno bien importante. Estamos en la fiesta grande”.
Las primeras señales de que los cimientos estaban en su lugar para una temporada ganadora de los Yankees se podían vislumbrar a través de cercas del alambre en las mañanas de febrero en Tampa, Florida, donde jugadores reconocidos llegaban semanas antes de sus fechas obligatorias de reporte. Un cambio de gran magnitud para traer a Soto hizo que todos soñaran en grande.
Mientras el poderoso dúo de Soto y Judge dio la cara todo el verano, otros aportaron su granito de arena el miércoles para asegurar la última victoria que necesitaban para encender las luces del Yankee Stadium este octubre.
El cubano Néstor Cortés lanzó seis entradas en blanco y Anthony Rizzo impulsó la carrera del desempate con un doble en el décimo episodio después de que Clay Holmes desperdiciara la ventaja, mientras los Yankees aseguraban su visita número 59 a la postemporada en la historia de la franquicia.
“Hemos jugado un gran béisbol en la última semana o dos”. expresó Cortés. “Hemos armado un gran equipo, y esto no termina aquí”.
Asegurando al menos un lugar en el Comodín mientras continúan apuntando al título de la División Este de la Liga Americana, esta es la séptima presentación en los playoffs de los Bombarderos en ocho campañas desde 2017.
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