Mientras los incendios forestales continuaban propagándose por las Carolinas el viernes, las tormentas dejaron fuertes lluvias en partes de Texas y Luisiana, mientras los meteorólogos advertían de un brote de clima severo durante el fin de semana.
Las alertas de bandera roja y los avisos de viento estuvieron activos el viernes en el centro y este de EE. UU., incluyendo Carolina del Norte y Carolina del Sur, donde un brote de incendios forestales provocó evacuaciones y destruyó viviendas. Los avisos de inundación se extendieron desde el sur de Texas y Luisiana, mientras una potente tormenta dejó entre 12 y 30 centímetros de lluvia.
Durante el fin de semana, los meteorólogos indican que más de 100 millones de personas corren el riesgo de sufrir condiciones climáticas severas, desde lluvias torrenciales y posibles tornados en la región de las Llanuras hasta granizo y fuertes vientos en el valle del Misisipi, según AccuWeather.
Más información: Una monstruosa tormenta se dirige al este este fin de semana y arrojará tornados, granizo y nieve.
El sábado, fuertes tormentas impactarán una zona desde Texas hasta Nebraska, Arkansas e Iowa. Al día siguiente, la volatilidad del clima se intensificará, trayendo consigo la amenaza de granizo, inundaciones repentinas y posibles tornados a una amplia franja del país, desde Michigan hasta la Costa del Golfo.
A medida que las tormentas avanzan hacia el este, podrían paralizar el tráfico y afectar los vuelos el lunes en varias ciudades importantes, como Atlanta, Charlotte, Washington, D.C. y Filadelfia.
Incendios forestales azotan las Carolinas
En Carolina del Norte, los incendios forestales continuaron propagándose en partes del estado devastadas por el huracán Helene hace unos seis meses. El mayor de los incendios, el Black Cove Complex, es el de mayor prioridad en EE. UU., lo que ha llevado a los estados vecinos a desplegar recursos para ayudar a contenerlo.
El Black Cove Complex, que arde en las afueras de la ciudad de Saluda, abarca 3288 acres y estaba contenido en un 17 % hasta el jueves por la noche, según el Servicio Forestal de Carolina del Norte. Las autoridades han determinado que fue causado por una línea eléctrica caída. Mientras tanto, al noroeste de Columbus, el incendio Deep Woods alcanzó 1373 hectáreas y estaba contenido en un 30%.
En Carolina del Sur, dos grandes incendios forestales han arrasado 25 kilómetros cuadrados de terreno y han seguido creciendo en los últimos días. El viernes, los meteorólogos advirtieron sobre la persistencia de fuertes vientos y condiciones secas en la región.
«Las condiciones meteorológicas de mañana son motivo de preocupación por el aumento de la actividad de los incendios, ya que se espera que la humedad relativa descienda al 23% y las ráfagas de viento podrían alcanzar casi 48 km/h», declaró la Comisión Forestal de Carolina del Sur.
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