La situación del Ártico “podría llegar a un punto de no retorno” si no se sientan las bases para paliar el efecto que el cambio climático está ejerciendo sobre este ecosistema, vital para el mantenimiento de la vida en el planeta. Así lo han expresado los expertos de varios países que han participado en el simposio “El Ártico: oportunidades y riesgos derivados del cambio climático”, organizado en Madrid por la Fundación Ramón Areces.
En la presentación de la jornada, el presidente del Consejo Científico de la Fundación, Federico Mayor Zaragoza, ha explicado que abordar el problema del cambio climático “es uno de los retos potencialmente irreversibles a escala mundial. La contracción de la capa de hielo marino, la pérdida de volumen de los glaciares con el consiguiente aumento del nivel del mar o la degradación de la capa de permafrost son algunos de los efectos visibles del calentamiento global, han destacado los expertos.
Julienne Stroeve, del Centro Nacional de Datos sobre Nieve y Hielo de Estados Unidos, ha explicado que la tasa de pérdida de hielo marino roza los 20.000 kilómetros cuadrados al año, con afecciones sobre numerosas especies y sobre la población “que vive conectada a ese ecosistema”.
“El hielo marino es fundamental para mantener fresco el planeta, aunque no está claro que el calentamiento del Ártico pueda influir en el cambio del clima en latitudes más bajas”, ha matizado.