Lima, (EFEverde).- El derrame de crudo que se produjo el viernes en la provincia del Datem del Marañón, en la región amazónica peruana de Loreto, ya ha sido controlado, informó hoy la petrolera estatal Petroperú.
Un comunicado oficial señaló que después de confirmarse “una contingencia” en el kilómetro 213 del Oleoducto Norperuano en el distrito de Barranca, “Petroperú puso en marcha su plan de contingencia y a la fecha informa que esta ocurrencia se encuentra controlada y que el crudo no ha llegado a ningún curso de agua.”
“En tal sentido, se viene trabajando intensamente en las tareas de reparación y remediación con el apoyo de contratistas internacionales especializados, en aplicación del plan de contingencia”, indicó.
La petrolera estatal afirmó que “continúa la investigación para determinar las causas y responsables de este incidente” y reiteró que el Oleoducto Norperuano no realiza labores de bombeo de crudo desde el pasado 16 de febrero, cuando se presentó otro derrame.
Agregó que ya se ha informado a los organismos supervisores y fiscalizadores del Estado, así como a las autoridades locales, sobre las tareas que realiza actualmente.
Preservación del medio ambiente :
“Petroperú ratifica su compromiso con la preservación del ambiente y viene trabajando en las tareas de reparación y remediación para resolver esta contingencia en el menor tiempo posible”, concluyó.
Medios locales informaron el viernes que la Policía de Iquitos, la capital de la región Loreto, había recibido la denuncia de un derrame de petróleo en una zona remota de la provincia del Datem del Marañón.
Tras conocer esa información, Petroperú envió un equipo técnico por vía fluvial desde su centro de operación más cercano y luego confirmó el derrame.
En enero y febrero pasado se registraron otros derrames de crudo en la región Amazonas y en Loreto, que contaminaron la selva peruana con unos 3.000 barriles de petróleo.
El Oleoducto Norperuano transporta el petróleo extraído en la selva peruana hasta el terminal portuario de Bayóvar, en el océano Pacífico, a lo largo de un trayecto de 854 kilómetros de tuberías. EFEverde