El aumento de las temperatauras como consecuencia del cambio climático está afectando de forma muy significativa a las empresas vitivinícolas.
«El cambio climático es el reto más importante al que nos enfrentamos», explicó Miquel Torres Maczassek, director general de Bodegas Torres, en el foro sobre sostenibilidad y medio ambiente de los productos agroalimentarios que organizó EXPANSIÓN y Bodegas Torres, con motivo del XXX aniversario del diario, con la colaboración de Areco envases reutilizables, Borges y KPMG. «Las viñas pueden vivir hasta 70 años: todo lo que hagamos hoy tendrá relevancia en el futuro», recalcó Torres Maczassek, que es miembro de la familia propietaria de la bodega.

Los viñedos son plantas muy sensibles ante alteraciones de las condiciones climáticas. Un incremento de tan sólo dos grados centígrados puede provocar variaciones en los niveles de acidez de la uva y alterar de forma dramática las propiedades del vino.