Marin Cilic hizo historia al derrotar a Andy Murray por 6-4, 7-5 en la final de Cincinnati. Con su triunfo del domingo en una hora y 34 minutos, se convirtió en el quinto tenista diferente a Murray, Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic en ganar un Masters 1000 desde 2010. Los cuatro fenómenos integran el Big-Four y han ganado 54 de los últimos 59 certámenes de la categoría.

Además, Cilic igualó al Big-Four y a Stan Wawrinka como los únicos tenistas activos con títulos de Masters 1000 y de Grand Slam, luego de triunfar hace dos años en el US Open. «Pensaba que iba a tener buenas posibilidades si jugaba bien», aseguró el croata, que terminó las semifinales ante Grigor Dimitrov a las 1:35am del mismo día de la final y tras remontar un 0-2 y un 2-4 en el tercer set.
«Fue muy difícil mentalmente ese partido. Había mucha humedad. Estábamos sudando mucho, con bastantes subidas y bajadas, especialmente en el tercer set. Tuve que trabajar duro en las emociones positivas y negativas, y eso quita mucha energía».
«Me fui a dormir a las 4:00am y me desperté un poco antes de las 11:00am. Fue suficiente para recuperarme. Y jugué muy buen tenis en la final. El servicio fue un gran factor en mi juego, sobre todo en puntos importantes. Estuve muy fuerte mentalmente en el segundo set. Es una gran victoria por ser ante Andy. Venía de una buena racha en los últimos meses».
Cilic, ganó un cheque de $834,700 y el regreso al Top 10 del Emirates ATP Rankings para ubicarse en la casilla No. 9. Un logro importantísimo después de una remontada épica en su primera semifinal en torneos de la categoría y considerando que antes de Cincinnati tenía récord de 0-8 en cuartos de final de Masters 1000.