Paris Saint-Germain's Argentinian forward Angel Di Maria celebrates after scoring a goal during the UEFA Champions League round of 16 first leg football match between Paris Saint-Germain and FC Barcelona on February 14, 2017 at the Parc des Princes stadium in Paris. / AFP / CHRISTOPHE SIMON (Photo credit should read CHRISTOPHE SIMON/AFP/Getty Images)

Dura noche para el Barcelona, que este martes encajó una derrota histórica por lo duro en el fondo y forma. Los azulgranas cayeron ante el Paris Saint-Germain por un 4-0 que le deja con pie y medio fuera de la competición. Espectacular partido del equipo de Emery.

Lo cierto es que en la llamada Ciudad de la Luz el Barcelona sólo vio oscuridad, al menos en la primera parte, donde fue arrollado por el músculo y el ritmo del Paris Saint-Germain. Rugió Parc des Princes y correspondió su equipo, que salió a morder desde el arranque, luchando cada balón y presionando muy arriba la salida de balón.

Sobrevivieron los azulgranas al primer cuarto de hora gracias a Ter Stegen, que no pudo hacer nada en el 18′ ante el lanzamiento de falta de un Di María enrachado ante el Barcelona. Lo mereció el Paris, que supo explotar la espalda de Busquets y el poco recorrido de André Gomes e Iniesta en faceta defensiva. Ahí encontraron un tesoro los galos.

Y mientras el tridente formado por Verratti, Rabiot y Matuidi se doctoraba con honores, André Gomes fallaba una clara ocasión con 1-0 en el marcador que pudo cambiar el sino del partido. Sólo Neymar acudió al naufragio azulgrana en una primera parte para olvidar culminada con un segundo tanto local, obra de Draxler tras pérdida de Messi y asistencia de un omnipresente Verratti.

El segundo tiempo continuó el mismo guion. El Barcelona siguió sin encontrar ninguna continuidad en su juego y acabó rendido a la superioridad local sin noticias de su tridente. Desenchufada la MSN y superado su centro del campo, fue coser y cantar para el Paris, que hizo el 3-0 con un espectacular tanto de Di María desde la frontal.

Para entonces Emery ya había soltado un grito de rabia mientras la grada se frotaba los ojos. Sólo faltaba el gol de su artillero. Se hizo de rogar, pero no falló Edinson Cavani, que puso la rúbrica a una noche inolvidable para el Paris, convertida en pesadilla para un Barcelona contra las cuerdas.

Angel Di Maria estaba celenbrando sus 29 y Edison Cavani 30.