24 de marzo de 2017, Oslo/Roma – La FAO y Noruega presentaron hoy un nuevo buque de estudios oceanográficos de vanguardia, uno de los más avanzados de en su categoría, y el único barco dedicado a la investigación que navega en el mundo bajo el pabellón de la ONU. Su misión: explorar los mares menos conocidos del planeta, utilizando tecnología punta y sofisticados equipos para ayudar a los países en desarrollo a reunir datos científicos de vital importancia para la gestión sostenible de la pesca y estudiar cómo el cambio climático está afectando a nuestros océanos.
El nuevo Dr. Fridtjof Nansen -el tercer barco bautizado con este nombre desde que la FAO y Noruega comenzaron su cooperación hace 40 años- alberga siete laboratorios diferentes rebosantes de instrumentación que usa la tecnología más avanzada.
Aquí se incluyen un equipo de sonar de última generación para analizar la biomasa y cartografiar los fondos marinos, un centro de control de vehículos submarinos operados por control remoto (ROV, por sus siglas en inglés) redes de arrastre que recogen el plancton y partículas microscópicas de plástico y un laboratorio diseñado específicamente para estudios climáticos. Todo ello convierte al Dr. Fridtjof Nansen es una de las naves de investigación oceanográfica más modernas del mundo.
Se trata además del único barco de investigacion que enarbola el pabellón de la ONU, por lo que es capaz de navegar libremente cruzando diferentes demarcaciones jurisdiccionales, sin encontrar trabas para abordar desafíos que afectan a los recursos naturales y que traspasan fronteras.
Desde la década de 1970, los científicos que trabajan en el marco de la iniciativa de Noruega y la FAO a bordo de los buques de investigación Nansen han colaborado con casi todos los países costeros de África para ayudarles a evaluar las poblaciones de peces, examinar características oceánicas como temperatura, salinidad y contenido de oxígeno, y extraer muestras del lecho marino para conocer mejor su naturaleza.
Estos datos -ampliados con el tiempo a través de un trabajo continuo-, son esenciales para el desarrollo de políticas pesqueras que promuevan una mejor y más sostenible utilización de los recursos marinos, fuente importante de alimentos e ingresos para millones de las personas más pobres del mundo.
En este proceso, cientos de científicos de los países visitados -principalmente en África, pero también en Asia y América del Sur- han trabajado y se han formado a bordo de los Nansen, adquiriendo nuevas habilidades y conocimientos que de otra manera podrían haber estado fuera de su alcance.
Al intervenir hoy en la ceremonia de bautismo de la embarcación en Oslo, la Primer Ministra noruega, Erna Solberg, aseguró que la ciencia y la colaboración internacional serán claves para implementar la Agenda 2030.
“Noruega, con su extensa costa y cultura oceánica entiende la importancia del ODS 14, que tiene como objetivo proteger nuestros océanos. Sabemos que esto no lo puede hacer ningún país por si solo. Requiere que todos pongamos de nuestra parte, y la colaboración entre Noruega y la FAO en el Nansen es un ejemplo de colaboración con los países en desarrollo para lograrlo”, dijo.
«Este nuevo buque nos permite operar e investigar mejor allí donde la exploración oceanográfica se ha visto muy limitada, y comprender mejor así el impacto del cambio climático y otros factores externos sobre los ecosistemas acuáticos, como la contaminación», señaló por su parte el Director General de la FAO, José Graziano da Silva.
«Esto es crucial – añadió- para permitir que los países en desarrollo incrementen la resiliencia de los ecosistemas y las comunidades costeras, especialmente en lo relativo a la pesca artesanal».
Investigar sobre el cambio climático
Hasta la fecha, los buques de investigación Nansen operados por el Instituto Noruego de Investigación Marina (IMR) han navegado el equivalente a más de 60 circunnavegaciones terrestres, reuniendo una ingente cantidad de información que comparten con los países participantes en el proyecto para mejorar su gestión pesquera.
Desde 2006, la FAO ha asumido la responsabilidad general del programa de investigación, prestando asesoramiento estratégico sobre la planificación de las misiones y apoyo técnico, diseñando estudios y enviando expertos a bordo de los buques Nansen, liderando las iniciativas de formación y desarrollo de capacidad, y coordinando con las autoridades nacionales los viajes de exploración.
Además, la voluminosa colección de datos sobre los océanos recopilada durante los 40 años del proyecto Nansen ofrece hoy a los investigadores una base valiosa para estudiar los patrones oceánicos actuales e idear modelos para comprender mejor las consecuencias del cambio climático.
Las nuevas instalaciones a bordo de este último buque oceanográfico permitirán un mayor enfoque en el estudio del impacto del cambio climático y la contaminación en los océanos. El pasado año, el anterior barco Dr. Fridtjof Nansen realizó un viaje de exploración en el Océano Índico meridional, obteniendo información sobre la basura y las micropartículas plásticas, entre otras actividades.
Un barco único
Diseñado por la empresa noruega Skipsteknisk y construido en los Astilleros Gondán (en España) con un coste de unos 80 millones de dólares EEUU, el Dr Fridtjof Nansen es propiedad de la Agencia Noruega para la Cooperación al Desarrollo (Norad) y será operado por el IMR.
El buque lleva el nombre del famoso naturalista noruego del siglo XIX -además de explorador, diplomático y Premio Nobel de la Paz- Fridtjof Nansen, cuyos intereses a lo largo de su vida incluyeron la oceanografía, llevándole a desarrollar algunos de los primeros equipos científicos modernos para estudios oceanográficos.