El koala, el emblemático marsupial que habita en Australia, corre el riesgo de desaparecer de ciertos parajes del este del país oceánico por la tala de árboles impulsada por la urbanización y el desarrollo agrícola y minero.
“Depende de la presión a la que estén expuestos, pero en algunas áreas los koalas estarían al borde de la desaparición en unos 20 años si se sigue arrasando sus hábitats”, dijo a Efe Christine Adams-Hosking, autora de un estudio revelado hoy por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).

Según esta investigación, la tala de árboles redujo un 53 y 26 por ciento la población de koalas en los estados orientales de Queensland y Nueva Gales del Sur, respectivamente.
Solamente en la Costa del Koala, al sur de Brisbane, la población se redujo en más del 80 por ciento entre 1996 a 2014.
Los estudios de densidad de población de koalas realizados por WWF también muestran que la situación es más grave en el sureste de Queensland, donde se calcula que unos 179 koalas habrían muerto entre 2013 y 2015, en un área de 44 kilómetros cuadrados.

Cambio climático

Con el cambio climático, los koalas de las zonas más alejadas de la costa tendrían que afrontar condiciones más calurosas y menos disponibilidad de agua, precisó la científica.
“Los gobiernos y las comunidades deberían pensar de forma estratégica para evitar que se sigan destruyendo los hábitats de los koalas”, precisó la experta.
Recomendó reforzar o ampliar los bosques con abundante población de estos animales y “la creación de zonas de amortiguación cerca de los ríos con eucaliptos”.
El koala, que es un animal muy delicado y especialmente sensible a cualquier cambio en el medio ambiente, permanece unas 20 horas al día dormitando o descansando, y utiliza las cuatro horas restantes para alimentarse con hojas de varias especies de eucaliptos. Efeverde